Diversidad religiosa y el estrés de las enfermedades infecciosas
Hace tres años Corey Finher y Randy Thornhill publicaron un libro en el que presentaron su teoría del estrés parasitario, teoría según la cual los patógenos con los que las poblaciones de una especie entran en contacto a lo largo del tiempo inciden en el desarrollo de los valores y cualidades de esa especie. Ya antes habían publicado algunos de sus resultados, así como avances de la teoría. En uno de los trabajos con más repercusión testaron una hipótesis en virtud de la cual la diversidad religiosa existente en una zona geográfica está directamente relacionada con el grado de estrés que las enfermedades infecciosas ejercen sobre las sociedades humanas. De acuerdo con esa hipótesis, cabe esperar que en los países con mayor variedad de enfermedades infecciosas presentar una mayor diversidad religiosa. La base argumental de la relación causa-efecto subyacente es la siguiente:
(1) Un grupo humano tiene inicialmente una distribución geográfica y un repertorio cultural y distribución de inmunidad uniformes.
(2) Con el tiempo, la inmunidad empieza a variar espacialmente, debido a la emergencia localizada de nuevos patógenos y a la evolución, también localizada, de inmunidad adaptativa en respuesta a aquellos.
(3) Bajo esas condiciones se seleccionan comportamientos que tratan de evitar el contacto con personas infectadas o potencialmente infectadas con los patógenos peligrosos. Estos comportamientos son (a) la “dispersión limitada”, reduciendo la interacción con personas de otros grupos, y (b) “socialidad restringida” a los miembros del grupo (y por lo tanto, adaptados inmunológicamente). Esta “socialidad restringida” se produce mediante el contacto (servicio religioso, reciprocidad, caza cooperativa, crianza cooperativa, etc.) y emparejamiento con individuos similares.
(4) Ese contacto selectivo promueve la divergencia cultural, al limitarse el flujo de valores e ideas entre los diferentes grupos humanos y, como consecuencia, da lugar a un aumento en la diversidad religiosa.
(5) La carrera “parásito-huésped” que se establece entre el patógeno y la persona infectada constituye un poderoso mecanismo evolutivo que puede incrementar la divergencia cultural dentro del rango cultural original del huésped.
(6) Cuanto mayor es la riqueza de patógenos en un área, mayor es la oportunidad para que se produzca variación espacial en las correspondientes carreras evolutivas “parásito-huésped”. La frecuencia, variación e intensidad de (2) (3) (4) y (5) covariarán de forma positiva con la diversidad de enfermedades infecciosas. Esto es, la diversidad de enfermedades dará lugar a una mayor diversidad cultural y religiosa.
La hipótesis la contrastan analizando la covariación de la diversidad religiosa y la diversidad de patógenos en 214 países, y estimando la correlación lineal entre ambas variables. Obtuvieron una correlación de 0’75, un valor extraordinariamente alto para variables de esta naturaleza. Concluyeron, por lo tanto, que el análisis realizado constituía un fuerte respaldo para su hipótesis.
A partir de los resultados los autores sostienen que, sin descartar el efecto de otros posibles factores, la aparición de nuevas religiones cumple la función de aislar a grupos humanos que se encuentran geográficamente próximos para así protegerlos de las infecciones para las que no están inmunológicamente protegidos. Sirva este ejemplo para ilustrar la teoría a la que hemos hecho mención al comienzo.
Fuente: Corey Fincher y Randy Thornhill (2008): Assortative sociality, limited dispersal, infectious disease and the genesis of global pattern of religion diversity Proceedings of the Royal Society B, 275: 2587-2594
Sobre el autor: Juan Ignacio Pérez (@Uhandrea) es catedrático de Fisiología y coordinador de la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU
El artículo Diversidad religiosa y el estrés de las enfermedades infecciosas se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
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Trenbideetako trafikoa kudeatzeko indarrean dagoen sistema da ERTMS. Abiadura handiko tren-zerbitzuetako nazioarteko kudeaketa-estandarra da eta segurtasun handiz kontrolatzen du trenen abiadura eta haien arteko segurtasun distantzia. Azpisistema bat baino gehiago ditu trenetara seinaleztapen komunikazioak bidaltzeko, baina komunikatzeko darabilen teknologia zaharkitua du.
ERTMS 1990eko hamarkadan zehaztu eta martxan jarri zenetik asko aldatu dira komunikazio sistemak eta teknologiak. Sistemak erabiltzen dituen teknologiak ez du funtzionatzen IP teknologiarekin (Internet Protocol, gaur egungo telefono, ordenagailu eta abarrek erabiltzen dutena). Zaharkitua egoteaz gain, ez dago ia hornitzailerik.
Hala, seinaleztapen sistemen digitalizazioan eta IP teknologiarako migrazioan murgilduta dago tren industria. Horretarako komunikazio arkitektura berria argitaratu du UNISIGek, ERTMS sistemaren espezifikazio teknikoak zehazteko ardura duen partzuergo industrialak.
Komunikazioaren abiadurari eragin diezaiokeen ezaugarri bat du, ordea, IP teknologiak: informazio mezuak paketetan banatuta bidaltzen ditu eta bakoitzak bere bidea egiten du. Horren ondorioz, ezin da saihestu paketeren bat atzeratuta iristea, sarearen punturen batean arazoren bat egonez gero.
IP bidezko komunikazioa bermatzenMuga horri irtenbidea emateko eta hurrengo belaunaldiko ERTMS sistemaren definizioan laguntzeko komunikazioen segurtasuna, fidagarritasuna eta erabilgarritasuna bermatuko duen komunikazio arkitektura berri bat proposatzen du UPV/EHUko Komunikazioen Ingeniaritza sailak CAF enpresarekin elkarlanean egindako ikerketa honek.
Estrategia erredundante desberdinak erabilita mezuak bidaltzea da proposamena. Aldi berean teknologia ezberdinak baliatuta, hala nola GPRS bidez, LTE bidez eta wifi bidez mezua bidaltzea. Sare arkitektura bat sortzen da modu honetan eta sareetako batean akatsen bat baldin badago, mezua besteren batetik iritsiko dela bermatzen da. Sistema erresilienteago egiten du honek, fidagarritasun handiagoa ematen dio komunikazioari eta sendoago bihurtzen du.
Lehentasun handiko mezuen komunikazioan erresilentzia bereziki bermatzea izan da helburua, atzerapen txikiagoarekin iritsiko direla bermatzeko. Izan ere, ERTMS arkitekturak bi mezu-mota bereizten ditu komunikazioetan: lehentasun handikoak eta normalekoak.
Proposamena egiteaz gain, ikerketarako berariaz diseinatutako sare simulatzaile baten bidez balioztatu dute komunikazio arkitektura. Kanal interferentzien aurrean UNISIGek plazaratutakoa baino askoz sendoagoa dela ikusi dute. Lehen aldia izan da, gainera, erronka guztiak gainditzeko gai den arkitektura bat plazaratzen dela.
Bide luzea gelditzen da proposamen hori etorkizuneko kudeaketa edo komunikazio sistema izatera iristeko, iristen bada. Honelako arkitekturak estandarrak izan behar dira, edozein fabrikatzailek egindako trenak elkarrekin komunikatu ahal izan daitezen. Eta estandarizazio eta baliozkotze hori UNISIGen esku dago.
Iturria: UPV/EHUko Prentsa bulegoa, Trenbideetako komunikazioa gaurkotzeko eta seguruago egiteko sistema bat
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Eran nuestras ballenas
No falta quien diga que los primeros hombres que afrontaron tamaña aventura necesitábase estuvieran muy excitados y que fuesen excéntricos y exaltados. Preténdese, además, que los primitivos pescadores de esos monstruos no fueron los discretos hombres del Norte, sino nuestros vascos, héroes del desvarío. Andarines terribles, cazadores del Monte Perdido y desenfrenados pescadores, recorrían en barquichuelos su caprichoso mar, el golfo o sumidero de Gascuña, dedicándose a la pesca del atún. Notaron aquellos intrépidos navegantes que las ballenas retozaban, y comenzaron a perseguirlas, lo mismo que se encarnizan detrás de la gamuza en los barrancos, los abismos y los más espantosos resbaladeros. A esa pieza de caza (la ballena) muy tentadora por su tamaño y por las vicisitudes que causa el perseguirla, hiciéronla guerra a muerte doquiera que la encontrasen y sin notarlo, empujábanla hacia el polo.
Allí el pobre coloso creyó poder vivir tranquilo, no suponiendo que los hombres fuesen tan locos que lo persiguieran hasta en aquellas apartadas regiones. La pobre ballena dormía muy sosegada, cuando nuestros atolondrados héroes se acercaron a ella cautelosamente.
Apretando su cinturón colorado, el más fornido, el más ágil saltaba de su barquichuelo, y ya encima de aquella mole inmensa, sin preocuparse del riesgo que pudiese correr su vida, lanzando un ¡han! prolongado, hundía el arpón en las carnes del confiado monstruo.
Jules Michelet, El mar, 1861.
El 22 de abril de 2015 se derogó en Islandia la ley que permitía matar vascos desde 1615. Ese día, según informaban las notas de prensa, el comisario Jónas Guomundsson suprimió la ley en presencia del Ministro de Educación y Cultura de Islandia, Illugi Gunnarsson, el Diputado General de Guipúzcoa, Martín Garitano, y Xabier Irujo, como descendiente de uno de los vascos asesinados, y Magnus Rafnsson, descendiente de uno de los islandeses que mataron a los vascos en 1615.
En aquellos años, islandeses y vascos tenían un acuerdo para la caza de ballenas. Los vascos instalaron una estación ballenera en la región de los Fiordos del Oeste. Cuando acabó la estación de caza y los vascos volvían a casa, una tormenta y los icebergs hicieron encallar tres barcos en los escollos de la costa. La mayoría sobrevivieron al naufragio y pudieron regresar pero unos cuantos se quedaron en la estación. Al mes siguiente, los que permanecieron fueron asesinados siguiendo la orden de las autoridades y según la ley, recién dictada, que permitía matar vascos. Solo hubo un superviviente.
Las primeras menciones escritas a balleneros vascos en Islandia están fechadas a comienzos del siglo XVII, en 1610, en la región de los Fiordos del Oeste, en el noroeste de la isla, aunque hay autores, como Alex Aguilar, de la Universidad de Barcelona, que lo fecha en documentos de 1412. También se cuenta que tres balleneros vascos estaban en Strandir en 1608 y otro, en el mismo lugar, en 1613. Este último atracó para extraer la grasa de las ballenas, que los vascos llamaban saín, y que era su producto comercial más valioso. En 1614 llegaron 11 barcos y en 1615 fueron 16. Y entre los de este año están los tres que naufragaron y los supervivientes fueron asesinados. Según las crónicas islandesas de la época, los mandaban los capitanes Martinus de Billa de Franca, Pedro de Arguirre y Stephan de Tellaria. De los 82 marineros que llegaron a tierra, 13 fueron asesinados mientras pasaban la noche en la estación, y otros 18 murieron en la campaña contra ellos de la población del lugar, liderada por el gobernador local Ari Magnusson.
En los diez años siguientes no hay mención a la presencia de balleneros extranjeros. Después, hasta comienzos del siglo XVIII, hay menciones esporádicas a la llegada de balleneros vascos. En 1712 se mencionan por escrito y por última vez y, después, lo prohibieron las leyes de Islandia. Sin embargo, en esos años la relación con los islandeses fue tan estrecha que existen tres glosarios de euskera-islandés de finales del siglo XVII y comienzo del XVIII. Los han estudiado varios expertos y, entre ellos, está Viola Giulia Miglio, de la Universidad de California en Santa Barbara. Los glosarios están depositados en archivos de Reykiavik, en Islandia.
La relación entre la especie humana y las ballenas viene de muy antiguo. Se han encontrado imágenes en rocas en Alaska fechadas hace 6000-8000 años, o en Noruega, de hace 9000-10000 años. En el País Vasco se han recuperado arpones de hueso de ballena, fechados hace unos 13000 años, en la cueva Lumentxa, en Lekeitio.
En la vertiente norte de Pirineos y según los estudios de Jean-Marc Pétillon, de la Universidad de Toulouse 2, existía, entre 13000 y 15000 años atrás, una industria que transformaba huesos de ballena en armas y herramientas, sobre todo en puntas de lanza de gran tamaño. Encontró artefactos, que publicó como la evidencia más antigua de industria con huesos de ballena, en la cueva de Isturitz, en Iparralde. Y más instrumentos en 11 cuevas del norte de Pirineos, de esta a oeste, y siempre fabricados con huesos de origen el Atlántico.
Algunos de esos instrumentos viajaron más de 350 kilómetros hasta el lugar donde se han encontrado. Las fechas de algunos de ellos llegan a los 17000 años atrás. Sin embargo, no se han localizado los talleres donde se fabricaban y tampoco se conoce si proceden de ballenas varadas en la costa o cazadas por balleneros. Pero, por el número de instrumentos encontrados y las distancias que han recorrido, tampoco parece que se obtengan los huesos originales en episodios esporádicos de caza o accidentales de varamiento. Propone Pétillon que, de alguna manera, debía existir algún tipo de caza de ballenas más sistemático.
Restos de ballena más recientes se han encontrado en un castro cerca de Gijón, la Campa de Torres, con fecha de entre 2300 y 2400 año, aunque, como es habitual, se desconoce si fue caza o varamiento.
La ballena que cazaban los vascos en el Cantábrico era la llamada, con propiedad, ballenas de los vascos o ballena franca (o right whale, en inglés), y de nombre científico Eubalaena glacialis. Este especie pesaba unas 60 toneladas, con un rango de 36 a 72 toneladas, media unos 15 metros, con máximos de 18 metros, y llevaba 270 barbas.
En verano, la ballena de los vascos migraba hacia el norte, hacia las Svalbard, Noruega e Islandia y, en invierno, viajaban al sur hasta Madeira, Azores, las costas del noroeste de África y, por supuesto, el Golfo de Vizcaya. Era la época del parto y, durante un tiempo, viajaban juntas la madre y el ballenato. Además, era la época en que se firmaban los contratos de caza entre los balleneros implicados y sus armadores y financiadores. Incluso entra en el contrato el atalayero, aquel que avisaba de la llegada de una ballena para que salieran de caza. Lo hacía desde la atalaya que, aunque se han perdido muchas, todavía se conserva alguna como, por ejemplo, la del monte Ulia en Donosti.
La embarcación de los balleneros vascos para la caza de la ballena era la chalupa o, también llamada barco, vizcaína, ballenera, piragua,… Más o menos tenía 10 metros de eslora y de 2 a 2.5 metros de manga, con unos 12 marineros, con 10 remeros más el timonel a popa y el arponero a proa. Llevaban queso y vino, mantas y ropa de abrigo y, por ejemplo, en Orio, unos 150 metros de soga, dos arpones, dos jabalinas grandes y una pequeña.
La principal riqueza de las ballenas era su grasa, el llamado saín, que calentaba e iluminaba edificios en toda Europa. Las barbas de la ballena, material flexible pero escaso, tenía muchos usos, y los huesos que sujetaban las barbas servían de mango de herramientas, sobre todo de cuchillos. La carne de la ballena se consumía fresca y, también, se secaba o salaba y se vendía en toda Europa.
Los testimonios escritos sobre balleneros vascos más antiguos están fechados en 1059, en Bayona, sobre la venta de carne del cetáceo, o en 1181 en Donosti con el reglamento y los impuestos a abonar por esa venta. También hay documentos de Santoña en 1190 o en Motrico en 1200. En Asturias la primera fecha documentada es de 1232 y en Galicia es 1371. Hasta 47 puertos del Cantábrico tuvieron asentamientos balleneros, y, por lo menos, 14 de ellos tienen una ballena en el escudo.
Toda la infraestructura, costumbres, práctica, tecnología y reglamentos de la caza de ballenas en el País Vasco son necesarios para las expediciones que, hemos visto, se hacían a Islandia y, también, a Terranova, a las islas Spitzberg o a Groenlandia. Para cazar ballenas en estos largos viajes se necesita aprender en casa, construir barcos adecuados, conseguir financiación, provisiones y demás pertrechos, y, a la vuelta, donde vender lo capturado, sobre todo la carne y la grasa.
En el Cantábrico y según varios autores con opiniones diferentes, el apogeo de la caza de ballenas varía desde el siglo XII y XIII hasta los siglos XIV y XV. Ya en el siglo XVI, el número de ballenas avistadas en la costa cantábrica disminuye y en el XVII casi desaparecen. Quizá fue una de la razones que empujó a los balleneros vascos hacia el norte y el oeste en busca de presas. Conocían sus migraciones anuales al norte y al sur y, simplemente, las siguieron. Hay autores que afirman que se llegaban a cazar, en el siglo XVI, hasta 100 ejemplares al año, y en muchos casos eran ballenas recién paridas con su ballenato. Los balleneros sabían que, si cazaban primero a la cría, mucho más fácil de atrapar, la madre no la abandonaría y podía ser capturada a continuación.
También hay que mencionar que desde el siglo XVI, quizá incluso desde mucho antes, en el siglo XIV, los vascos pescaban bacalao y ballenas en Terranova. Quizá por entonces ya eran conocidos en el Atlántico Norte europeo, en Islandia en concreto.
Los países del norte de Europa pronto aprendieron a cazar ballenas y descubrieron el negocio que suponía, sobre todo la venta de la grasa. Y parece que lo aprendieron de los balleneros vascos pues era habitual que contrataran, por ejemplo en Holanda e Inglaterra, a arponeros vascos. Así lo decretó, en 1612, el rey Jacobo II de Inglaterra.
No es fácil reunir cifras de las ballenas que se cazaban en aquellos años. Cuando se pagaban impuestos, los llamados diezmos, al gobierno, a algunas autoridades o a la Iglesia, los datos, siempre aproximados pueden dar una idea de las poblaciones de ballenas de la época. Alfredo Salvador y Carlos Nores, del Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid y de la Universidad de Oviedo, respectivamente, han recopilado datos de Zarauz, Getaria y Lekeitio. Dan 35 capturas a principios del siglo XVI, y caen hasta 5 capturas a principios del XVIII. Hay quien da la fecha de 1766 como el final de la caza de ballenas en el Cantábrico. Durante los siglos XVIII y XIX hubo algunas capturas esporádicas, e incluso se perdieron las herramientas para cazar y se olvidaron las técnicas de acercamiento y captura.
La última ballena se cazó en Orio el 14 de mayo de 1901. Y se cazó con dinamita pues, como decía, las técnicas tradicionales se habían perdido.
Además de a Islandia, como ya hemos visto, los balleneros vascos fueron de caza a Terranova, en su singladura más conocida y popular. Eran mares ricos en bacalao y hay autores que sugieren que los vascos fueron a Terranova, en primer lugar, a pescar bacalao y, de paso, aprovecharon el paso de las ballenas.
Las primeras citas de balleneros vascos en Terranova que se aceptan por los estudiosos se fechan en el segundo cuarto del siglo XVI, en concreto en 1531, tal como cuenta Selma Huxley, de la Universidad de St.John’s, en Terranova. Volvían a casa con bacalao y carne de ballena en salmuera, más el saín y las barbas de las ballenas. Entonces, con un gran desarrollo de los astilleros, y la llegada de saín y bacalao, en el País Vasco la economía se basaba en el hierro y la fabricación de herramientas y armas, y, por supuesto, en la ballena, y más en el bacalao. Los balleneros vascos fueron los primeros que montaron toda una organización social para la caza de ballenas con objetivos comerciales. También era un hecho aceptado que los vascos, en la primera mitad del siglo XVI, tenían los mejores barcos. Así que, en ese siglo, los balleneros vascos eran mayoría en Terranova.
Durante todo el siglo XVI llegaron a Terranova de 15 a 20 barcos cada verano, y traían de vuelta unos 9000 barriles de saín. A finales de siglo, declina la caza de ballenas y van pocos barcos a Terranova. La mayoría de los barcos y los marineros son alistados obligatoriamente en la Armada Invencible de Felipe II contra Inglaterra. Y el desastre que supuso también desbarató la flota vasca, tanto por pérdida de naves como de tripulaciones experimentadas. El Tratado de Utrecht, en 1713, concedió aquellas tierras a franceses e ingleses y terminó con los viajes de los balleneros vascos.
También en Terranova, como ocurría en Islandia, había una relación estrecha entre los balleneros vascos y los indios de la zona, sobre todo con los mik’mac y, todavía, algunas palabras en euskera sobreviven en su lengua y en el francés de Canadá.
Incluso podemos conocer la dieta de los balleneros con los hallazgos del grupo de William Fitzhugh, de la Institución Smithsonian, en el yacimiento de Hare Harbour, en la Isla Petit Mécatina, en el Golfo de San Lorenzo. Hay restos de ballena de Groenlandia, no de la ballena de los vascos, y bacalao que capturaban para traer a casa y comerciar. Los restos que nos indican su dieta son de aves como alcas, frailecillos, gaviotas, gansos, patos, cisnes, perdices y cuervos; de mamíferos como focas, cerdo doméstico, jabalí, caribú, vaca y zorro; y frutas como avellanas, nueces, melocotones y ciruelas.
En la actualidad, la ballena de los vascos es rara en el Atlántico Norte occidental, en las costas de Norteamérica, y mucho más rara en el Atlántico Norte oriental, en las costas europeas. Es difícil saber cuantas ballenas de los vascos quedan. A principios del siglo XX estaba cercana a la extinción, cuando se estimaba que había unos 60 ejemplares, cifra basada en escasas evidencias y más en suposiciones personales. Después se fue recuperando lentamente pero, en la década de los noventa, comenzó de nuevo a disminuir su número.
Entre 1980 y 2000, el Acuario de Nueva Inglaterra fotografió unos 10000 avistamientos de cetáceos, y Masami Fujiwara y Hal Caswell, del Instituto Oceanográfico de Woods Hole, identificaron en esas imágenes a 350 ballenas de los vascos. Los autores deducen que había poco más de 300 individuos de Eubalaena glacialis a principios de este siglo. Parece que estaban muriendo las ballenas en edad de ser madres. Los autores proponen que salvando, cada año, a dos ejemplares que puedan tener crías la población se estabilizaría. La protección legal internacional de especies en peligro de extinción considera que la ballena de los vascos es la especie de gran tamaño con más riesgo de desaparecer.
A menudo se ha propuesto que se ha llegado a esta situación, por lo menos en Norteamérica, por la caza de los vascos en el siglo XVI, seguido por la acción de los balleneros de la costa oeste de Estados Unidos (recordar Moby Dick) durante los siguientes dos siglos y medio. Sin embargo, cuando Brenna McLeod y su grupo, de la Universidad Trent, en Canadá, analizaron el ADN de los 218 huesos de ballena encontrados en el asentamiento de balleneros vascos de Red Bay, en Labrador, solo uno de ellos es de la ballena de los vascos. La mayoría son de otra especie de ballena, la Balaena mysticetus, conocida como ballena de Groenlandia o ballena boreal. Para cuando llegaron a la zona de Terranova los balleneros vascos, la población de Eubalaena glacialis era mucho menor de lo que se suponía. No hay que olvidar que la ballena de los vascos tiene el dudoso honor de ser la que tiene la más larga historia de ser cazada entre todas las ballenas.
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Sobre el autor: Eduardo Angulo es doctor en biología, profesor de biología celular de la UPV/EHU retirado y divulgador científico. Ha publicado varios libros y es autor de La biología estupenda.
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Osasunari dagokionez, Bittor Rodriguez Riverak jaso du aste honetan eskolan elikadura osasungarria sustatzearen aldeko NAOS Estrategiaren X. Saria, AECOSAN Espainiako Kontsumo, Elikagaien Segurtasun eta Nutrizio Agentziaren eskutik. Haurren artean fruta eta barazkien kontsumoa sustatzeko programa bat zuzentzen du Gasteizko Udalarekin batera eta egitasmoak emaitza onak eman ditu.
FisikaTximistek erreakzio nuklear atmosferikoak eragiten dituztela baieztatu dute ikertzaile japoniar batzuek. Erreakzio horietan isotopo erradioaktiboak sortzen direla ikusi dute gainera. Horien artean aurkitzen dira 13C, 14C eta 15N, adibidez.
BiologiaKhoisan jendea eta bostwanoak izan dira artikulu honen funtsa. Bi etnia horien jatorria oso desberdina da, testuan azaltzen denez. Khoisanak Kalahariko basamortuan bizi dira eta ehiztari/biltzaileak dira; bostwanoak, berriz nekazariak. Talde bien dietaren osagaiak desberdinak dira gainera. Txoriak, sugeak eta muskerrak, besteak beste, dira khoisanen dietan dauden osagaiak eta bostwanoen kasuan, artoa eta basartoa. Listuaren amilasa izan zen bi horien erkaketa egiteko aukeratu zuten entzima. bostwanoen amilasa-jarduera 248 unitate/ml-koa izan zen, eta sanena, berriz, 22 unitate/ml-koa, hamaika aldiz apalagoa. Bistan da, beraz, digestioaren beharren araberakoa dela entzima-jarduera hori.
AstronomiaEguzki-sisteman sartu den asteroide bat aurkitu dute. Eguzki-sisteman asteroide bat sartzen den lehendabiziko aldia da. Izan ere, orain arte aurkitu izan direnak –beste kometa eta asteroideak– eguzki-sisteman bertan sortutakoak ziren. Oraingoan, Oumuamua asteroide berria kanpoan sortutakoa da. Pasa den urrian Hawaiiko Pan-STARRS teleskopioak antzeman zuen; 400 metroko luzera du, eta 7,3 ordutik behin biratzen da bere ardatzaren inguruan. Ikertzaileek adierazi dute jada pasa dela Eguzkitik gertueneko bere puntutik, eta izarrarteko espaziora bidean doala.
Zientziaren dibulgazioaZientziaren dibulgazioa irratian hizpide duen estatuko aurreneko tesia defendatu dute Euskal Herriko Unibertsitatean. Javier San Martin kazetariak deskribatu ditu irratiko zientzia-dibulgazioaren ezaugarriak eta ereduak. Lan horretan, Espainiako 25 irratsaiok eta Radio 4- BBC irrati publikoko irratsaioak zientziaren berri nola ematen duten konparatu da. Ikerketan ikusi da alde handia dagoela Espainiako irratsaioen eta BBCren artean, hala nola denbora, irratsaioaren arkitektura, giza baliabideekin lotutako aldeak… Edukiari dagokionez, irrati publiko batzuetan, eduki zientifikoen aldeko apustua eta sasi-zientzien eta fenomeno paranormalen aldekoa maila berean daudela utzi du agerian ikerketak. Horretaz gain, irratiko zientzia komunikazioa oraindik ere nagusiki aldebakarrekoa dela azaleratu du ikerlanak.
Berriak egin dio elkarrizketa Javier San Martin kazetariari. Orain Radio Euskadiko Hágase la luz saioan dabil lanean eta hor La cápsula de la ciencia atala egiten. Horrez gain, Activa tu neurona bloga egiten du. Elkarrizketan dio “oso deigarria” dela saioak nortzuk aurkezten dituzten. “BBCn, normalean, zientzialariak dira, baina ez edonolakoak: komunikazioan ibilbide oso luzea duten zientzialariak izaten dira. Espainiako Estatuan, berriz, kontrakoa gertatzen da: fisika edo kimikako fakultatetik atera berri diren ikasleei mikrofono bat ematen diete nahi dutena egiteko”. Estereotipo ohikoenak aipatzen ditu tartean. Esaterako, zientzia jende oso azkarraren kontua dela. Horren gainean dio: “Nerabezaroan hartzen da erabaki hori; nesken kasuan autoestimu baxuagoa izaten denez, gutxiago animatzen dira matematikan edo ingeniaritzan aritzera”.
Gazteek zientziaz ikuspegi estereotipatua dutela dio Danel Solabarrietak. Hamar urtetik gora darama Elhuyarren lanean. Bere lanaren ildo bat da “gazteei, bai hezkuntza formalean bai ez-formalean, aukerak ematea zientziarekiko ikuspegi erreala izateko”. Horregatik dio, gazteak, adibidez, “informatika-ikasketak hasi eta sorpresak hartzen dituzte, ez dakitelako, berez, zer den informatika ikastea. Zientzien mundua zenbat eta gertuago eduki, estereotipo gutxiago izango dute hari buruz”.
ArkeologiaNeolitoa Euskal Herrira nola heldu zen eta nolakoa izan zen jakiteko zantzu berriak eskuratu dituzte. Ikerketa horretan parte hartu dute Javier Fernandez Eraso eta Juan Antonio Mujika Alustiza EHUko arkeologoek, Arabako Errioxako zenbait trikuharritako laginekin. Egindako genomaren analisiari esker ikusi da “Europa osoan ikusi da Neolitoa ekarri zuten lehenengoek gurutzatze gutxiagoa izan zutela. Gero etorri zirenek, berriz, gurutzatze handiago baten arrastoa zuten euren genometan». Oro har, nahasketa horrek 3.000 urtez iraun zuela kalkulatu dute ikertzaileek.
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Asteon zientzia begi-bistan igandeetako atala da. Astean zehar sarean zientzia euskaraz jorratu duten artikuluak biltzen ditugu. Begi-bistan duguna erreparatuz, Interneteko “zientzia” antzeman, jaso eta laburbiltzea da gure helburua.
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Egileaz: Uxue Razkin Deiako kazetaria da.
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Lourdes Basabe y los microlaboratorios
El pasado 14 de septiembre de 2017 se celebró la primera edición de Naukas Pro, en el que Centros de Investigación, Laboratorios, científicos de renombre o equipos de trabajo contaron con 20 minutos para explicar a un público general en qué consiste su trabajo.
7ª conferencia: Lourdes Basabe, investigadora Ikerbasque, del Cluster de Microfluidica UPV/EHU, Centro de Investigación Lascaray.
Loudes Basabe presenta una charla sobre su trabajo en el laboratorioEdición realizada por César Tomé López a partir de materiales suministrados por eitb.eus
El artículo Lourdes Basabe y los microlaboratorios se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Ezjakintasunaren kartografia #192
Analisi ekonomiko askoren oinarrian pertsonak, denak, geurekoiak garela dago. Suposizio eztabaidagarria. Zer nolako eragina du honek, baina, eredu ekonomikoetan? Mario Bungek dioen bezala indargabetu egiten ditu? José Luis Ferreiraren Selfishness in Economics.
Zeluletan dagoen proteina da JNK eta bere aktibitatea, obesitatearekin areagotzen dena, II motako diabetesean intsulinari erresistentzia sortzearen kausetako bat da. Tiazolidinedionak zelula-mekanismo honen gainean eragiten eraginkorrak liratekeela frogatu du Caelles doktorearen taldeak. One kinase to rule diabetes? The role of JNK.
Simulatzaile kuantiko unibertsala lortzeko irrikitan daude egoera solidoa ikertzen duten zientifikoak; ez da erraza, baina. Pausuak ematen dituzte DIPCkoek Juan Ignacio Ciracek koordinatutako taldean: soinu uhinak erabilita, elektroiak eta kuasipartikulak harrapatzeko gai dira. Towards a universal quantum simulator: acoustic traps for quasiparticles
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Mapping Ignorance bloga lanean diharduten ikertzaileek eta hainbat arlotako profesionalek lantzen dute. Zientziaren edozein arlotako ikerketen azken emaitzen berri ematen duen gunea da. UPV/EHUko Kultura Zientifikoko Katedraren eta Nazioarteko Bikaintasun Campusaren ekimena da eta bertan parte hartu nahi izanez gero, idatzi iezaguzu.
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El consumidor etnocéntrico
La literatura ha tratado los conceptos de producto local, producto regional y producto tradicional como si fuesen independientes. Sin embargo, en la práctica, estos conceptos están interrelacionados en muchos productos de alimentación. El trabajo ahora publicado pretende resolver dos cuestiones principales: por una parte, conocer la valoración de productos de alimentación que reúnan las características de los productos locales, regionales y tradicionales, a través del análisis de marcas concretas de productos; por otra, estudiar el posible vínculo entre el nivel de etnocentrismo de los consumidores y la valoración y la compra efectiva de marcas locales-regionales-tradicionales.
El etnocentrismo es un concepto elaborado por la antropología para definir la tendencia emocional que hace de la cultura propia el criterio exclusivo para interpretar los comportamientos de otros grupos, razas o sociedades y, en virtud de ello, rechazar, excluir o marginar todo aquello que no forme parte de ella. En ese sentido, y aplicado al consumo de productos locales, regionales y tradicionales, hablaríamos de la predisposición de las personas por consumir ese tipo de alimentos frente a otros de origen diferente.
La mayoría de estudios previos plantean al consumidor la valoración y la intención de compra de productos locales o tradicionales, pero a un nivel general, abstracto, que no permite al encuestado valorar una marca concreta que puede encontrar disponible en el mercado y que efectivamente puede consumir. “Creemos que una aportación importante de este trabajo es el nivel de análisis elegido. Es decir, analiza marcas específicas dentro de diferentes categorías de productos en dos entornos geográficos diferentes en España”, explica Aitor Calvo Turrientes.
Para realizar el análisis se han considerado cuatro productos con denominación de origen. Todos ellos reúnen las características atribuidas a los productos locales-regionales-tradicionales: D.O.P. Queso Idiazabal, D.O.P. Rioja (Rioja Alavesa), D.O.P. Torta del Casar y D.O.P. Dehesa de Extremadura. Para el estudio, una muestra de consumidores vascos y extremeños han respondido a una serie de cuestiones relacionadas con la valoración y compra de estos productos, así como sobre sus tendencias etnocéntricas.
“Los resultados muestran que esos productos gozan de una alta consideración por parte de los consumidores, que los compran en una proporción elevada frente a otras alternativas.Además, se observa que los niveles de etnocentrismo del consumidor están relacionados, en ocasiones, pero no siempre, con la compra efectiva de esas marcas locales-regionales-tradicionales, lo que pone de manifiesto la necesidad de incluir la categoría del producto en el análisis de los efectos del etnocentrismo del consumidor”, concluye el investigador.
Referencia:
Pilar Fernández Ferrín, Aitor Calvo Turrientes, Belén Bande, Miren Artaraz Miñón, M. Mercedes Galán Ladero. (2017) The valuation and purchase of food products that combine local, regional and traditional features: The influence of consumer ethnocentrism Food Quality and Preference doi: 10.1016/j.foodqual.2017.09.015
Edición realizada por César Tomé López a partir de materiales suministrados por UPV/EHU Komunikazioa
El artículo El consumidor etnocéntrico se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Vida bajo la luz cenicienta
Auguste Comte, filósofo augusto no solo de nombre y padre del positivismo, figura inscrito con letras de oro en el panteón de Patinazos Épicos de la Historia gracias a esta lapidaria sentencia con la que —prácticamente— abrió en 1835 el segundo tomo de su Curso de Filosofía Positiva:
Concebimos la posibilidad de determinar sus formas, sus distancias, sus tamaños y sus movimientos; mientras que en modo alguno podríamos jamás averiguar su composición química, su estructura mineralógica o, con más razón, la naturaleza de la materia organizada que viva en su superficie […]
Les Luthiers nos enseñaron que no hay que perder ocasión de hacer la epistemología y por ello es de ley reconocer que la ciencia moderna le debe algo al positivismo de Comte. Eso, sin embargo, no salvó al filósofo francés de ser sumariamente atropellado con un avance fulgurante escasas décadas después de publicar su seminal obra. Hubo un aviso veinte años antes: en 1815, el joven Joseph Fraunhofer —que nunca dejaría de ser joven, para desgracia suya y de todos— había puesto a trabajar un espectrómetro con el que descubrió que a la luz solar le faltaban 574 líneas. 574 colores de menos que anunciaban la era que abrieron definitivamente Kirchhoff y Bunsen en 1859, en la que podríamos conocer a distancia la composición química de los astros: la era de la espectroscopia.
No podemos culpar a Comte de no verlo venir: no tenía el don de la presciencia ni un Google decimonónico al que consultar lo que además parece un resultado francamente antiintuitivo: ¿cómo vamos a poder conocer la composición de mundos a los que jamás podremos viajar? (Nota: si la especie humana acaba viajando por todo el Universo ocuparé con gusto mi sitio junto a Comte en ese panteón de Patinazos Épicos.) Lo cierto es que la capacidad de los átomos y las moléculas de emitir y absorber frecuencias concretas de luz nos ha conferido un superpoder: el de conocer la composición, a distancias inimaginables, de las estrellas, las nebulosas ¿y las atmósferas de los planetas?
El poder de los espectros
Descomponer la luz de otros mundos mediante un prisma es algo que lleva haciéndose rutinariamente desde hace más de un siglo y medio. Esta técnica nos ha enseñado que la composición de todos los cuerpos visibles del Universo es muy uniforme y está dominada por los elementos más simples que existen: hidrógeno (74%) y helio (24%). El 2% restante («metales» para los astrónomos) es la fracción minoritaria que centra el interés de astroquímicos y exobiólogos. El misterio aún envuelve muchos aspectos relacionados con la vida, pero parece claro que es un fenómeno de base química relacionado con la aparición de la complejidad. Sin ese dos por ciento de elementos «extra», los enlaces e interacciones posibles entre átomos se verían fatalmente limitados. Encontrar las firmas espectroscópicas de estos elementos y las moléculas que forman es clave si pretendemos averiguar, algún día, si existe vida más allá de la burbuja de aire que rodea nuestra pequeña mota azul.
Desde finales de los años 80, la creciente precisión en los métodos astrométricos de detección de exoplanetas —mayoritariamente medidas de velocidad radial (coloquialmente «bamboleo» estelar) y, sobre todo, de tránsitos (ocultaciones parciales de estrellas por planetas que las orbitan y que provocan pequeños cambios en la luz recibida de éstas)— ha permitido que los descubrimientos de sistemas planetarios aumenten con un ritmo exponencial. Aunque las formas de llevar a cabo las medidas, así como su precisión, favorecieran en un principio el descubrimiento de lo que se dio en llamar «jupíteres calientes», planetas muy grandes y muy cercanos a sus respectivas estrellas, es cada vez más frecuente encontrarse con descubrimientos de planetas más pequeños y ubicados en las zonas de habitabilidad teóricas de sus sistemas estelares.
Sin duda no estamos muy lejos de ubicar planetas de tamaño terrestre transitando ante sus estrellas con órbitas que les permitirían, al menos teóricamente, sustentar agua líquida de forma permanente en su superficie. Auténticos análogos terrestres alrededor de soles lejanos: pero una cosa es encontrar un lugar que podría albergar vida y otra, muy distinta, es descubrirlo. ¿Podemos siquiera soñar con tal cosa?
Si es posible detectar la minúscula fracción de luz de una estrella que, durante una ocultación planetaria, atraviesa la atmósfera del planeta para llegar hasta nuestros instrumentos, también debería poderse —restando previamente el espectro de la luz normal de la estrella— hallar la huella espectroscópica de la composición de la atmósfera planetaria. Esto, que parece una hazaña imposible, ya ha ocurrido en varias ocasiones. Un ejemplo de la precisión que puede alcanzarse hoy: utilizando técnicas de espectroscopia diferencial y el instrumento HARPS en el telescopio de 3,6 metros del Observatorio Europeo Austral (ESO) en La Silla, Chile, pudo caracterizarse la presencia de sodio atómico en la atmósfera alta de HD 189733b. Este planeta orbita una estrella de tipo espectral K (una enana naranja; nuestro Sol es una enana amarilla de tipo G) a 62,9 años luz de distancia en la constelación Vulpecula. Con una masa de 1,15 veces la de nuestro Júpiter y una órbita que le lleva a rodear su estrella cada 2,2 días, las medidas basadas en el espectro han podido incluso confirmar que su atmósfera contiene vientos de 7000 kilómetros por hora que arrastran incesantes lluvias de cristal fundido: silicatos de sodio a 700 °C.
Está claro que HD 189773b está casi todo lo lejos que se puede estar de ser un «análogo terrestre», pese a que su color (que, increíblemente, también ha podido ser estimado) debería ser un azul profundo —haciendo de él otro «punto azul pálido» en la inmensidad del espacio. Pero cuando algún día encontremos un planeta realmente similar a nuestra Tierra, algo que solo es cuestión de tiempo, ¿cómo sabremos que puede albergar vida? La respuesta a esta pregunta, más allá de la medida de características orbitales que nos lleven a inferir posibles temperaturas superficiales, pasa naturalmente por el análisis de datos espectrográficos. Y qué mejor análisis que poder comparar el espectro de un planeta así con el de la única muestra que conocemos de planeta que alberga vida: ¿por qué no medir el espectro de la luz del Sol reflejada o transmitida por la propia Tierra a gran distancia?
La forma obvia de obtener ese espectro consistiría en lanzar una sonda que se alejara mucho de la Tierra —idealmente unos cuantos años-luz— e hiciera la medida. Lo más cerca que hemos estado de conseguir algo así han sido las imágenes del «punto azul pálido»: la original de 1990 tomada por la sonda Voyager 1 a casi cinco horas y media de distancia a la velocidad de la luz (5900 millones de kilómetros) o la más reciente tomada por la sonda Cassini en 2013 desde la órbita de Saturno a 1500 millones de kilómetros. Lamentablemente, ni la Voyager 1 ni la Cassini estaban equipadas para realizar un espectro de la luz solar reflejada por la Tierra desde sus puntos de vista. Que alguna vez se lance una misión tan lejos con un propósito tan limitado parece, además, harto improbable. Sin embargo, hay una forma más sencilla de obtener la misma información gracias a nuestra compañera de viaje en el Sistema Solar: la Luna.
La luz cenicienta
La Luna, vista desde la Tierra, presenta lo que llamamos fases: cambios en su iluminación superficial debidos a las posiciones relativas de la Luna, la Tierra y el Sol. La fase «nueva» corresponde al momento de la órbita de la Luna en la que se encuentra situada directamente entre la Tierra y el Sol, y por tanto nos muestra su mitad oscura; para llegar a la fase «llena» la Luna debe recorrer la mitad de su órbita alrededor de la Tierra hasta encontrarse en el punto en que nos muestra su mitad iluminada —y por tanto, la Tierra está ubicada entre el Sol y la Luna. Si observamos el sistema con un poco de detenimiento, no es complicado darse cuenta de que las fases lunares están complementadas con otras análogas terrestres, pero exactamente invertidas: vista desde la Luna, la Tierra presenta la fase opuesta a la que se ve en la Luna desde la Tierra, como si se miraran en un espejo.
Además, debido a que la Luna tiene la rotación acoplada con la traslación alrededor de la Tierra, siempre muestra el mismo lado. Esto tiene como consecuencia que para cualquier punto de la cara visible de la Luna, la Tierra siempre está en aproximadamente el mismo lugar del firmamento (la libración orbital provoca un pequeño desplazamiento mensual aparente de la Tierra en el cielo lunar). Las diferencias de tamaño y de albedo superficial entre la Tierra y la Luna provocan así un interesante fenómeno: la noche lunar en la cara visible está siempre iluminada por la Tierra llena, y esta iluminación es mucho más intensa que la que provoca la Luna llena en la noche terrestre. Tanto, que puede percibirse desde la Tierra en forma de una iluminación difusa de la zona nocturna de la Luna, sobre todo cuando ésta se encuentra próxima a su fase nueva o hace pocos días que la ha pasado.
Este efecto de iluminación se denomina «luz cenicienta», y tiene la propiedad de que uniformiza completamente la luz que proviene de la cara iluminada de la Tierra debido a la rugosidad aleatoria del terreno lunar —esto es, devuelve una «luz media» de la reflejada por la Tierra. La luz cenicienta que observamos en la fase nueva de la Luna debería por tanto contener información del espectro medio de reflexión de la superficie terrestre, exactamente tal y como se vería desde un punto muy alejado del espacio que no permitiera resolver detalle superficial alguno. Es decir, como si se tratara del espectro de reflexión de un exoplaneta.
El espectro de la luz cenicienta revela de la Tierra una serie de potentes marcadores biológicos, entre los que destacan oxígeno molecular y metano en cantidades alejadas de su equilibrio químico —y que por tanto deben ser mantenidas por algún proceso externo, así como la presencia de un «borde rojo» (red edge): una zona de cambio rápido de la reflectividad en el infrarrojo cercano. La clorofila presente en las plantas terrestres absorbe una gran cantidad de luz en la zona visible del espectro, pero se hace casi transparente para longitudes de onda superiores a los 700 nanómetros.
Cuando logremos obtener un espectro de suficiente calidad de la luz de un exoplaneta similar a la Tierra podremos aplicar estas mismas técnicas de análisis para intentar determinar parámetros de la composición de su superficie y su atmósfera. ¿Aparecerán estos biomarcadores? ¿Veremos otros diferentes? El estudio del espectro de la luz de mundos lejanos nunca podrá ofrecernos una certeza absoluta acerca de «la naturaleza de la materia organizada que vive en su superficie», como dijo Comte; pero podrá acercarnos a la solución del enigma de la vida en el Universo mucho más de lo que jamás pudo soñarse hasta hace apenas un suspiro de la historia de la Humanidad.
Este post ha sido realizado por Iván Rivera (@Brucknerite) y es una colaboración de Naukas con la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU
Para saber más
Comte, A. (1835). Cours de philosophie positive (Vol. II, 19ème leçon). Paris: Borrani et Droz. Visitado el 29/10/2017 en http://gallica.bnf.fr/ark:/12148/bpt6k762681/f9.image.
Nous concevons la possibilité de déterminer leurs formes, leurs distances, leurs grandeurs et leurs mouvements ; tandis que nous ne saurions jamais étudier par aucun moyen leur composition chimique, ou leur structure minéralogique, et, à plus forte raison, la nature des corps organisés qui vivent à leur surface […]
Kirchhoff, G. (1860). Ueber die Fraunhofer’schen Linien. Annalen der Physik und Chemie, 185(1), 148-150. doi:10.1002/andp.18601850115.
Suess, H. E., & Urey, H. C. (1956). Abundances of the Elements. Reviews of Modern Physics, 28(1), 53-74. doi:10.1103/revmodphys.28.53.
Richmond, M. Spectroscopy of exoplanets. Rochester Institute of Technology. Visitado el 05/11/2017 en http://spiff.rit.edu/classes/extrasol/lectures/spectra/spectra.html.
Wyttenbach, A., Ehrenreich, D., Lovis, C., Udry, S., & Pepe, F. (2015). Spectrally resolved detection of sodium in the atmosphere of HD 189733b with the HARPS spectrograph. Astronomy & Astrophysics, 577. doi:10.1051/0004-6361/201525729.
Marín, D. (15/02/2014). El planeta azul en el que llovía cristal. Naukas. Visitado el 05/11/2017 en http://danielmarin.naukas.com/2013/07/11/el-planeta-azul-en-el-que-llovia-cristal/.
Arnold, L. (2007). Earthshine Observation of Vegetation and Implication for Life Detection on Other Planets. Space Science Reviews, 135(1-4), 323-333. doi:10.1007/s11214-007-9281-4.
Sterzik, M. F., Bagnulo, S., & Palle, E. (2012). Biosignatures as revealed by spectropolarimetry of Earthshine. Nature, 483(7387), 64-66. doi:10.1038/nature10778.
El artículo Vida bajo la luz cenicienta se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Ion Errea: “Hidrogeno metalikoaren sorrerak iraultza zientifiko bat ekar dezake” #Zientzialari (83)
1935. urtean Eugene Wigner eta Hilliard Bell Huntington fisikariek hidrogeno molekula bat presio jakin baten pean jarriz gero, molekula bera hautsi eta hidrogeno metaliko bat sortuko litzatekeela aurresan zuten. Materia berri honek goi mailako ezaugarriak izango lituzkeela iragarri zuten eta, ordutik, berau sortzeko etengabeko ahaleginak egin dira. Bada aurten, baieztapen hura egin eta 80 urtera, Harvard Unibertsitateko hainbat ikertzailek hidrogeno metalikoa lehenengoz sortzeko gai izan direla iragarri dute. Hala ere, askok zalantzan jarri dute sorkuntza hau. Zer dakigu ordea materia honi buruz? Zergatik ekarriko luke horrelako iraultza? Non aplikatuko litzateke?
Hidrogeno metalikoari buruz gehiago jakiteko, Ion Errea UPV/EHUko Fisikako irakaslearekin izan gara. Bere esanetan, kalkulu teoriko guztien arabera, materia hau supereroalea izango litzateke giro tenperaturan, sekulako berrikuntza eraginez.
‘Zientzialari’ izeneko atal honen bitartez zientziaren oinarrizko kontzeptuak azaldu nahi ditugu euskal ikertzaileen laguntzarekin.
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Fallos científicos en el cine, mejor vídeo de divulgación joven “On zientzia”
“Fallos científicos en el cine” de Mario Martínez es el vídeo ganador del premio joven al mejor vídeo de divulgación de la 7ª edición de los premios On Zientzia. Mario recoje las mayores pifias científicas recurrentes en el cine en un vídeo muy cinematográfico.
¿Tienes una idea genial para explicar un concepto científico en un vídeo? ¿Quieres ver tu trabajo emitido en televisión? La Fundación Elhuyar y el Donostia International Physics Center (DIPC) han organizado la octava edición de On zientzia, un concurso de divulgación científica y tecnológica enmarcado en el programa Teknopolis, de ETB. Este certamen pretende impulsar la producción de vídeos cortos y originales que ayuden a popularizar el conocimiento científico.
On zientzia tendrá tres categorías. El mejor vídeo de divulgación recibirá un premio de 3.000 euros. Para impulsar la producción de piezas en euskera, existe un premio de 2.000 euros reservado a la mejor propuesta realizada en ese idioma. Por último, con el objetivo de impulsar la participación de los estudiantes de ESO y Bachillerato, hay un premio dotado con 1.000 euros para el mejor vídeo realizado por menores de 18 años.
Los vídeos han de tener una duración inferior a los 5 minutos, se pueden realizar en euskera, castellano o inglés y el tema es libre. Deben ser contenidos originales, no comerciales, que no se hayan emitido por televisión y que no hayan resultado premiados en otros concursos. El jurado valorará la capacidad divulgativa y el interés de los vídeos más que la excelencia técnica.
Las bases las encuentras aquí. Puedes participar desde ya hasta el 25 de abril de 2018.
Edición realizada por César Tomé López
El artículo Fallos científicos en el cine, mejor vídeo de divulgación joven “On zientzia” se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:La práctica de la ciencia y la práctica del sexo
Como hemos repetido a menudo y es obvio, los científicos son humanos. Y como el resto de los humanos los romances, escarceos, líos y tragedias o comedias amorosas abundan en los lugares donde trabajan. No miente aquel viejo refrán que dice que el hombre es fuego, la mujer estopa, y viene el diablo y fú; sopla, igual en un laboratorio que en una oficina o una tienda, en una factoría o en un taller, en la tripulación de un barco que en trabajo de campo. En el día a día de la ciencia hay muchas parejas que se conocieron en el trabajo como en cualquier otro campo, a veces con sus pequeñas catástrofes domésticas como divorcios o traumáticas separaciones, a veces con la complicidad añadida de estar con alguien que sabe exactamente a qué te dedicas, a veces incluso con consecuencias sobre el trabajo mismo o sobre la carrera de uno u otro participante. Está en la naturaleza humana.
Algunos tipos de práctica científica pueden incluso ser especialmente dados a este tipo de situaciones. La sensación de formar un pequeño club especial con los pocos que entienden tu (necesariamente reducido) campo de estudio; la incomprensión de familia, pareja y amigos. Las largas jornadas de laboratorio hasta horas intempestivas, a menudo con pausas forzadas, siempre con poco respeto a fiestas y vacaciones. Las estancias de estudio en instituciones ajenas, quizá en el extranjero; la obligatoria etapa itinerante del postdoc. Las jornadas de campo, alejados los investigadores del resto de la gente, aislados en precarios alojamientos y condiciones de vida; las aventuras y desventuras de la prospección, la observación o el viaje remoto y la sensación de que lo que pasa en el campo permanece en el campo. Las personas en situaciones de aislamiento y soledad somos vulnerables a la tentación. Las personas caen, a menudo, en ella.
Esto es simple y llana naturaleza humana, pero como en otras actividades también puede contener rastros de otro elemento, como es el poder, que lo convierte en algo mucho más turbio. En ciencia y en el ámbito académico es común que trabajen juntos personas de diferentes edades y muy diferentes categorías en lo que se refiere a prestigio, influencia y poder real. Alumnos y profesores, doctorandos y catedráticos, técnicos y postdocs forman parte de la mezcla de personas que trabajan juntos. Algunas categorías están en situación social y profesional privilegiada: el profesor titular, el catedrático de la asignatura, el director del departamento. Otras tienen su futuro por desarrollar y por tanto son vulnerables: quien está asentado en la práctica académica y científica puede tener un impacto desmesurado en las perspectivas de carrera profesional de un doctorando o un postdoc, para bien o, ay, para mal. Porque la historia nos enseña que cuando las personas tienen poder sobre otras personas siempre hay alguna que abusa de ese poder. Y es cuando se mezclan las cosas del querer o la lujuria con el desequilibrio de poder cuando todo se complica.
La actual oleada de descubrimientos sobre abusos a mujeres por parte de hombres poderosos en diferentes industrias (medios, TV, cine, fuerzas armadas, etc.) no ha librado al mundo de la ciencia. Se están publicando casos en los que hombres en situación dominante desde el punto de vista profesional han abusado de esa posición para obtener favores de mujeres u otros hombres. Se han hecho públicos hechos que van desde la situación incómoda al acoso o casi la agresión sexual en entornos como la astronomía o la geología de la Antártida, y sin duda se conocerán muchos más. Los foros profesionales y las charlas de café abundan en comentarios más o menos maliciosos sobre científicos que tienen las manos demasiado largas, o que de forma sistemática y en serie seducen a sus estudiantes más atractivas. La ciencia, por desgracia, no proporciona necesariamente una moral a quienes la practican. Y los abusos durante demasiado tiempo han quedado impunes.
Cuando existe un fuerte desequilibrio entre el poder de los participantes incluso las relaciones consentidas quedan manchadas de sospecha. Y estos desequilibrios pueden ser muy marcados y tener consecuencias muy desagradables incluso cuando las relaciones sentimentales (o sexuales) no forman parte del problema y es simplemente un conflicto intelectual. Bien está que cada vez sean menor tolerables este tipo de comportamientos que deben ser erradicados; también de los laboratorios y los centros de investigación, como del resto de la sociedad.
Sobre el autor: José Cervera (@Retiario) es periodista especializado en ciencia y tecnología y da clases de periodismo digital.
El artículo La práctica de la ciencia y la práctica del sexo se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
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Animalien funtzio biologiko guztiak, janaria lortzea eta digeritzea barne, hautespen naturalaren menpe daude. Horrek esan nahi du berezko moldaerak garatu dituztela bai janaria lortzeko bai eta digeritzeko ere. Hortaz, animalia batek erabiltzen duen elikadura-baliabideen ezaugarriek eragin nabarmena dute animalia horren zenbait ezaugarritan, bai anatomikoetan bai eta fisiologikoetan ere. Ezaguna da, esaterako, denboran zehar agertu diren hominidoen hortz-haginen ezaugarriak janaren araberakoak direla. Izan ere, aurkituriko hortzeria fosilari esker jakin dezakegu gaur zein zen espezie bakoitzaren ohiko janaria.
Baina, esan bezala, moldaerak ez dira ezaugarri anatomikoetan soilik gertatzen; fisiologiari dagozkionak ere garrantzi handikoak dira. Harreman zuzena dago, adibidez, animalia baten janari motaren eta dituen digestio-entzimen artean. Horrela, karbohidrasak dira karbohidratoetan aberatsa den jana erabiltzen duten espezieen digestio-entzima nagusiak. Gauza bera gertatzen da, esaterako, proteasa eta proteinekin. Espezieen arteko desberdintasunez ari gara, noski, baina espezie berean ere, desberdintasun handiak egon daitezke populazio desberdinen arteko digestio-entzimen horniduretan.
Khoisan[1] jendea eta bostwanoak Afrikako hegoaldean bizi dira. Bi etnia horien jatorria oso desberdina da, eta haien hizkuntzak elkarrengandik oso urrun daude. Khoisan jendearen khoisan hizkuntza munduko berezienetakoa da, eta ez omen du harreman zuzenik alboko hizkuntzekin; bostwanoena, berriz, Afrikako beste zenbait hizkuntzaren ahaidea da, bantu familiakoa. Geografikoki oso urrun ez dauden arren, zeharo desberdinak dira giza talde horien ingurumenen ezaugarriak. Khoisanak Kalahariko basamortuan bizi dira eta ehiztari/biltzaileak dira; bostwanoak, berriz, nekazariak. Hori horrela, giza talde egokiak dira digestio-entzimen horniduren arteko erkaketa egiteko, elikadura-baliabide desberdinak dituztelako. Zenbait landareren tuberkuluekin batera, txori, suge, musker eta damanak dira khoisanen dietaren osagai nagusiak, eta artoa eta basartoa, bostwanoena.
Listuaren amilasa izan zen erkaketa hori egin zuten ikertzaileek aukeratu zuten entzima. Amilasak almidoia eta antzeko karbohidrato konplexuak digeritzen laguntzen du, eta gizakiok bi aldaera edo barietate ditugu, listuarena eta arearena. Listu-amilasak aho-barrunbean egiten du bere lana, hortz-haginen birrintze-lana osatuz. Listu-laginak hartzea oso erraza denez, oso erosoa da listu-amilasarekin lan egitea. Erkaketa egin zen, beraz, sanen eta bostwanoen listu-amilasen artean, baina, ikerketa osatzeko, jatorri europarreko Hegoafrikako biztanleen laginak ere hartu ziren. Azken hauen ohiko janak denetariko produktuak ditu.
Erkaketaren emaitzak argiak izan ziren: bostwanoen amilasa-jarduera 248 unitate/ml-koa izan zen, eta sanena, berriz, 22 unitate/ml-koa, hamaika aldiz apalagoa. Jatorri europarreko herritar hegoafrikarrena, bestalde, 101 unitate/ml-koa izan zen; hau da, beste bi balioen erdian geratu zen. Bistan da, beraz, digestioaren beharren araberakoa dela entzima-jarduera hori, zerealez osaturiko jatekoa hobeto digeri baitaiteke listuaren amilasa-jarduera handia bada.
Baina datu horiek ez digute argitzen aztertutako desberdintasun horien jatorria zein den. Hau da, ezin jakin daiteke jarduera-maila horiek giza taldeen berezko ezaugarriak ote diren ala janariaren araberako ezaugarri aldakorrak. Beste era batera esanda: elikadura bereziena erakusten dutenak san taldekoak izanik, haien listuaren amilasa-jarduera jatekoaren aldaketa baten ondorioz alda ote liteke?
Ez dakigu, baina ―ikertzaileek ez dutelako horren berririk eman―, zer-nolako iritzia zuten bost khoisanek epaiketan zehar jan behar izan zutenaz, baina, aukeran, seguru sugeak eta muskerrak nahiago zituztela.
Oharrak:
[1] Herbeheretatik heldutako kolonizatzaileek khoisan herritarrei boskimano izena eman zieten. San edo khoisan deiturak egokiagoak dira; giza talde handiagoari dagozkio bi izen horiek.
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Egileez: Juan Ignacio Pérez Iglesias (@Uhandrea) eta Miren Bego Urrutia Biologian doktoreak dira eta UPV/EHUko Animalien Fisiologiako irakasleak.
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Artikulua UPV/EHUren ZIO (Zientzia irakurle ororentzat) bildumako Animalien aferak liburutik jaso du.
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La invariancia de Lorentz supera dos pruebas más
Cada vez que alguien consulta su posición en la superficie del planeta usando un GPS está confirmando la teoría de la relatividad de Einstein, de la misma forma que cada vez que se enciende una pantalla se confirma la existencia de los electrones. Con todo,los científicos no se quedan nunca conformes, y si en el úlltimo siglo no se hubiesen hecho ya suficientes pruebas de que la relatividad funciona, quizás la más espectacular la reciente detección de ondas gravitacionales, siempre quedará comprobarlo con más precisión si cabe.
La llamada invariancia de Lorentz significa que una medición física no debe depender de la velocidad u orientación del marco de referencia del laboratorio. Es una simetría fundamental en la relatividad y en el modelo estándar de la física de partículas, pero ciertas ideas que intentan unificar las dos teorías predicen su ruptura. A pesar de numerosos estudios, sin embargo, no se ha encontrado prueba alguna de violaciones de la simetría de Lorentz. Dos equipos de investigadores lo han recomprobado estableciendo de paso algunos de los límites más estrictos hasta la fecha sobre tales violaciones.
Para comprobar la simetría de Lorentz, ambos equipos usaron el mismo marco teórico, que describe la simetría para todas las partículas y fuerzas, incluida la gravedad, en términos de coeficientes que son nulos cuando se cumple la simetría. Pero derivaron los coeficientes usando datos obtenidos de dos tipos muy diferentes de experimentos.
El equipo encabezado por Natasha Flowers, del Carleton College (Minnesota, Estados Unidos) analizó medidas tomadas en el transcurso de unos pocos años con gravímetros superconductores, dispositivos que determinan la aceleración gravitatoria local midiendo la posición de una esfera superconductora que levita en un campo magnético. Los valores de los coeficientes resultantes son todos consistentes con cero, pero en comparación con estudios gravimétricos previos, algunos de los valores son más de 10 veces más precisos, mientras que otros se han obtenido por primera vez.
Mientras tanto, el encabezado por Adrien Bourgoin, de la Universidad de Bolonia (Italia), analizaron los datos de 48 años de experimentos de medición con el experimento LR3, en el que los rayos láser emitidos desde la Tierra se reflejan en los espejos en la superficie de la Luna colocados por las misiones Apolo 11, 14 y 15 para medir el movimiento orbital y rotacional del satélite. En este caso los investogadores también encuentran que los datos son consistentes con coeficientes nulos. Sin embargo, para algunos de los coeficientes, la precisión es de 100 a 1000 veces mejor que la de las mejores estimaciones actuales.
Esta visto, en esta época de incertidumbre, si quieres aprender algo que describa cómo funciona el universo con una fiabilidad contrastada, estudia la teoría de la relatividad.
Referencias:
Natasha A. Flowers et al (2017) Superconducting-Gravimeter Tests of Local Lorentz Invariance Phys. Rev. Lett. doi: 10.1103/PhysRevLett.119.201101
Adrien Bourgoin et al (2017) Lorentz Symmetry Violations from Matter-Gravity Couplings with Lunar Laser Ranging Phys. Rev. Lett. doi: 10.1103/PhysRevLett.119.201102
Sobre el autor: César Tomé López es divulgador científico y editor de Mapping Ignorance
Este texto es una colaboración del Cuaderno de Cultura Científica con Next
El artículo La invariancia de Lorentz supera dos pruebas más se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Compartiendo un rumor
Compartimos debajo un ¿rumor?… ¡No! De momento, un problema propuesto en 2001 en Crux Mathematicorum, revista científica publicada por la Sociedad Canadiense de Matemáticas, y que contiene problemas matemáticos para estudiantes de secundaria y pregrado.
Ana, Beatriz, Carlos, David, Elena, Fátima, Guillermo, Hugo e Inés forman parte de la comisión de estudiantes de su Facultad. Se reúnen con poca frecuencia y, además, al ser sus ideas bastante diferentes, no conversan demasiado.
En la siguiente tabla se resumen las relaciones entre estas nueve personas (cada una está representada por la inicial de su nombre): 0 significa que las dos personas no se hablan y 1 que lo hacen con frecuencia.
Se sabe que Ana compartió hace unos días un rumor con los dos colegas con los que mantiene comunicación (David y Guillermo), que lo escucharon una vez y solo una –esta vez que Ana se lo transmitió–. A su vez, cada uno de ellos se lo contó a una de las personas con las que habitualmente habla.
Si numeramos a Ana, como iniciadora del rumor con un 1, y Elena fue la novena y última del grupo en escuchar el rumor, ¿quién fue la quinta persona en enterarse de él?
La solución propuesta por la propia revista solo requiere un poco de lógica para usar de la mejor manera los datos proporcionados.
En efecto, sabemos que Ana inicia el rumor y que Elena es la última persona que se entera.
Entre las demás personas –eliminando también a David y Guillermo que lo saben por Ana y que no vuelven a escuchar el rumor–, Fátima y Hugo son los que menos relaciones tienen, al hablarse solo con dos de las personas del grupo. Así que empezaremos por ellos.
Según los datos de la tabla, a Fátima le debe llegar el rumor vía Inés y se lo cuenta después a Beatriz (IFB) o viceversa (BFI). Del mismo modo, Hugo se lo escucha a Beatriz y se lo transmite después a Carlos (BHC) o viceversa (CHB).
Al unir estos dos fragmentos del itinerario del rumor, obtenemos la serie de cinco personas (CHBFI) o (IFBHC). Además, ninguno de estos dos posibles caminos recorridos por el rumor se une con A o con E, ya que Ana no se habla ni con Carlos ni con Inés, y lo mismo sucede con Elena.
Por el anterior comentario, David y Guillermo deben ir necesariamente en los extremos de (CHBFI) o (IFBHC). Pero, David no se habla con Carlos, aunque si con Inés. Guillermo, al contrario, se habla con Carlos, pero no con Inés.
Así, podemos asegurar que el orden de transmisión del rumor entre estas siete personas –excluyendo a Ana y Elena– ha sido (GCHBFID) o (DIFBHCG). Añadiendo a Ana y Elena a esta serie, quedaría que el rumor iniciado por Ana ha llegado a Elena de alguna de estas dos maneras: (AGCHBFIDE) o (ADIFBHCGE).
De cualquiera de los dos modos, la quinta persona en enterarse del rumor ha sido Beatriz.
Notas:
Visto en: The Grapevine, Futility Closet, 16 noviembre 2017
Extraído de: R.E.Woodrow, The skoliad Corner no. 8, Crux Mathematicorum 27:3 (Abril 2001), pág. 194
Sobre la autora: Marta Macho Stadler es profesora de Topología en el Departamento de Matemáticas de la UPV/EHU, y colaboradora asidua en ZTFNews, el blog de la Facultad de Ciencia y Tecnología de esta universidad.
El artículo Compartiendo un rumor se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Emaitza ez hain gozoak azukrearen industriarako
San Frantzisko Kaliforniako (AEB) Unibertsitateko ikertzaileek aste honetan argitaratutako ikerketa baten arabera, Ameriketako Estatu Batuetako azukrearen industriak sakarosaren, minbiziaren eta hiperlipidemiaren arteko lotura erakusten zuen ikerketak ezkutatu zituen.
Iazko irailean JAMA Internal Medicine aldizkarian ikerketa talde horrek argitaratutako dokumentu historikoen beste analisi batek hautsak harrotu zituen. Dokumentu horien arabera, SRF Azukrearen Ikerketarako Fundazioak (orain Sugar Association )1965ean New England Journal aldizkarian argitaratutako berrikusketa-ikerketa bat sekretupean finantzatu zuen. Arratoietan, sakarosaren kontsumoa eta odoleko lipido mailak lotzen zituen ebidentzia alboratua izan zen berrikusketa horretan. Lotura horrek erakusten zuen CHD bihotzeko gaixotasun koronarioarekin harremana zegoela.
Oraingoan, antzeko esku-hartzea islatzen duten dokumentuen analisia argitaratu dute PLOS Biology aldizkarian. Kasu honetan, argitu dute nola SFR fundazioak “259 proiektua” izenekoa finantzatu zuen, baina bertan ateratzen ari ziren emaitzek industriaren interesen kontra jotzen zuten; industriak finantzazio hori kendu zuen.
Proiektu horrek germenik gabeko arratoietako odolean karbohidratoen eta lipidoen mailak neurtzea zuen helburu. Germenik gabeko arratoi hauen bitartez, ikertzaileek hesteetako mikrobiotak sortutako eragina neurtzeko bidea izan zuten ikertzaileek. Birminghameko Unibertsitateko (Erresuma Batua) WFR Pover doktoreak gidatu zuen proiektua, 1967 eta 1971 bitartean. Ikerketa horretan azukre maila altuko elikadura jasotzen zuten arratoiek triglizeridoen maila baxuagoak zituztela aurkitu zuten, oinarrizko elikadura hartzen zuten arratoiekin alderatuz.
“Industriak zientzian egiten duen manipulazioa dokumentatzen duen literatura multzo handiago bati egindako ekarpena da ikerketa hau”, aipatu dute artikuluan. Egileek beste hainbat arloetan industriak izandako rola gogoratu dute, hala nola tabakoa, botiken eragin terapeutikoa, azukredun edarien eragina osasunean eta klima-aldaketaren jatorria, besteak beste. Arlo hauetan guztietan “industriaren aldeko interpretazioak” sustatzeko finantzazioa bultzatzen dela salatu dute.
Bereziki tabakoaren industriaren garrantzia azpimarratu dute. Izan ere, ikerketan parte hartu duten zientzialarietako batzuek tabakoaren industria ere ikertu dute. Zentzu honetan, tabakoaren industriak bere produktuek osasunean duten eraginari buruzko ikerketa zabalak egin dituela diote, “askotan zientzia komunitateak baino hamarkada batzuk lehenago, baina bere interesetara egokitzen ez diren emaitzak ez ditu argiratu”. Ikertzaile hauen aburuz, azukrearen industriak antzeko jokabidea egin du.
Egileek argudiatu dute ikerketaren emaitzak jakinarazteak arreta ekarriko zuela sakarosaren eta minbiziaren arteko ustezko loturak argitzeko, eta iradoki dute industriak hori ekidin nahi izan zuela. 1969an, esaterako, FDA Botika eta Elikagaien Administrazioak elikagaia ziurrak biltzen diten GRAS zerrendatik kendu zuen ziklamato izeneko edulkoratzaile artifiziala, elikaduran ziklamato kopuru altua jaso zuten arratoiek maskuriko minbizia garatzeko joera erakusten zutelako.
Historian zehar industriako hainbat sektoreek erakutsitako jarrera etiko arbuiagarria salatzeaz gain, berrikusketa honek ikerketa lerro interesgarriak berreskuratzeko bidea ireki lezake ere. Zentzu honetan, egileek uste dute interesgarria litzatekeela azukre agregatuek osasunean duten ondorioei buruz 1960ko hamarkadan egindako zenbait aurrerapen berreskuratzea.
Batetik, tiamina aipatu dute: odoleko lipidoetan sakarosak eta almidoiak duten eragina zehazteko orduan bitamina honen eskasiak izan dezakeen rola ikertzea merezi duela diote. “Bakterioen bidez sintetizatutako tiaminak osasunean duen eragina argitzeko dago oraindik”.
Bestetik, karbohidratoen kalitatearen, gernuko beta-glukuronidasaren eta maskuriko minbiziaren arteko harremana ere ikertzeko modukoa dela deritzote. “259 proiektuko emaitzek iradokitzen dute karbohidratoen kalitateak gernuko beta-glukuronidasa modula dezakeela”.
Artikuluan aipatzen dutenez, 2016ko urtarrilean, SRF fundazioari lotuta dagoen Sugar Association erakundeak prentsa oharra kaleratu zuen, Cancer Research aldizkarian argitaratutako artikulu baten emaitzak kritikatuz. Artikulu horretan azukrea tumoreen hazkundearekin eta metastasiarekin lotzen zuten. Elkarteak argudiatu zuen lotura hori ez zela sinesgarria. Halere, hemendik aurrera sinesgarritasuna berreskuratzea zaila izango du industria honek bultzatutako edozein ikerketak.
Erreferentzia bibliografikoa:
Kearns CE et alia. Sugar industry sponsorship of germ-free rodent studies linking sucrose to hyperlipidemia and cancer: An historical analysis of internal documents. PLoS Biol 15(11): e2003460. DOI: https://doi.org/10.1371/journal.pbio.2003460
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Egileaz: Juanma Gallego (@juanmagallego) zientzia kazetaria da.
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Los compartimentos líquidos de los animales
La mayor parte de los animales tienen una cavidad interna denominada celoma en cuyo interior hay un fluido, el líquido celómico. En los grupos en que se halla bien desarrollado, el interior del celoma está recubierto por un epitelio de origen mesodérmico denominado peritoneo. El celoma separa el intestino de la pared corporal y en su interior se encuentran los órganos. En varios grupos animales alberga un conjunto de células –celomocitos- que ejercen funciones inmunitarias. El líquido celómico protege frente a los golpes y presiones que recibe la pared corporal y que podrían deformar las estructuras internas; y también proporciona estabilidad a la estructura general del animal y al mantenimiento de la postura corporal ejerciendo la función de esqueleto hidrostático. Además, pone en contacto unos órganos con otros y transporta entre ellos gases, nutrientes y productos de deshecho. También permite el almacenamiento de gametos durante su maduración. El líquido celómico se mueve gracias a la acción de cilios o por la contracción de la musculatura de la pared corporal. Hay grupos, como los poliquetos y oligoquetos (anélidos), en los que la segmentación corporal ha conducido a la correspondiente segmentación de la cavidad celómica. Y en otros como, por ejemplo, hirudíneos (anélidos), moluscos y artrópodos, dicha cavidad ha quedado reducida a pequeñas áreas: canalículos en sanguijuelas, espacios que albergan corazón y gónadas en moluscos, y espacios asociados a la reproducción y excreción en artrópodos.
El celoma se desarrolló en los animales triblásticos, pero se perdió en algunos grupos –llamados acelomados-, seguramente a causa de una reducción del tamaño corporal1. Además de estos, esponjas y cnidarios, también carecen de cavidad interna. Ninguno de estos animales tiene un órgano respiratorio distinto del tegumento, por lo que necesitan, a cambio, una gran superficie corporal en relación con su volumen o masa; y cuando tienen sistema digestivo, este cuenta con muchas proyecciones o ramificaciones de manera que llegan a la proximidad de casi todas las células. Todas las sustancias que necesitan incorporar o eliminar se transfieren por pura difusión; de ahí la gran importancia de contar con extensas superficies de intercambio.
En otros linajes, la pérdida del celoma se vio compensada por la aparición de lo que se denomina un pseudoceloma que es, en realidad, el blastocele embrionario que se mantiene a lo largo de toda la vida. Los animales pseudocelomados –así se llaman- carecen de sistema vascular, de manera que las sustancias son transferidas por difusión desde el interior al exterior y viceversa, o entre diferentes órganos.
Como se ha dicho, la mayor parte de los animales son celomados. Ya se ha señalado que en los que tienen un celoma bien desarrollado el líquido celómico puede cumplir funciones de comunicación y de transporte de diferentes sustancias entre los diferentes órganos. Sin embargo, tiene una seria limitación, ya que no puede dirigirse con precisión a diferentes destinos, ni ser impulsado con intensidades diferentes en una u otra dirección. Y además, en algunos grupos la cavidad celómica se ha visto muy reducida. Por esas razones, en los celomados que han alcanzado una mayor complejidad estructural, el celoma ha sido sustituido a esos efectos por sistemas circulatorios.
Como vimos aquí, hay sistemas circulatorios abiertos y cerrados. Los moluscos gasterópodos y bivalvos, y los artrópodos tienen sistemas abiertos. En ellos la hemolinfa –el equivalente de la sangre- se mueve a través de vasos y se vierte a los espacios extracelulares, de manera que baña directamente las tejidos con los que intercambia sustancias. La cavidad interna formada por los espacios extracelulares se denomina hemocele. En los moluscos, la hemolinfa es impulsada por el corazón y llega, a través de arterias que se ramifican de forma progresiva, hasta los espacios extracelulares; después es recuperada por las venas y devuelta al corazón. En los artrópodos el esquema es algo diferente. El corazón de los insectos, por ejemplo, es un tubo dispuesto en posición dorsal que impulsa la hemolinfa hacia delante. La aorta da continuidad al corazón y alcanza la zona anterior del cuerpo, donde vierte la hemolinfa al hemocele. Aquella, después, se desplaza hacia la parte trasera y va reingresando en el corazón a través de unos poros, denominados ostia, que se distribuyen longitudinalmente. El sistema de los crustáceos es, por comparación con el de insectos, mucho más complejo; el corazón, también en posición dorsal, bombea la hemolinfa hacia la parte posterior, a través de una aorta y arterias que se ramifican al llegar a los tejidos; y al retornar hacia el corazón pasa antes por las branquias. La hemolinfa contiene varios tipos celulares, denominados de forma genérica hemocitos. Ejercen funciones diversas: defensa frente a patógenos, coagulación y, en algunos casos, transporte de gases respiratorios.
Anélidos, moluscos cefalópodos y vertebrados tienen sistemas circulatorios cerrados. A diferencia de los anteriores, la sangre fluye de forma continua a través de los elementos que lo constituyen sin ser vertida y recuperada a y desde una cavidad interna. No obstante, el plasma sanguíneo si puede salir de los capilares y ser recuperado posteriormente en los mismos capilares o a través del sistema linfático. Esa “fuga” y posterior recuperación constituye lo que se denomina intercambio capilar, y es el mecanismo que facilita el reparto de sustancias a los tejidos o su toma para su posterior eliminación. La sangre está formada por el plasma –agua con diferentes sustancias disueltas y proteínas en suspensión coloidal- y por células especializadas que, en vertebrados pueden ser de tres tipos: eritrocitos o glóbulos rojos, leucocitos o glóbulos blancos, y trombocitos, de los que se derivan las plaquetas (salvo en mamíferos, en los que las plaquetas proceden de los megacariocitos de la médula ósea). Los glóbulos rojos transportan oxígeno y CO2, los blancos son parte del sistema inmunitario, y las plaquetas ejercen funciones de coagulación en la cicatrización de heridas.
Además de los líquidos citados hasta ahora (celómico, hemolinfa y sangre), todos los animales tienen un fluido que baña sus células al que llamamos líquido intersticial. En los animales con sistema circulatorio abierto no hay discontinuidad entre ese líquido y la hemolinfa, y sí hay una cierta discontinuidad con la sangre en los animales con sistema cerrado. Finalmente, está el líquido intracelular, al que ya nos referimos aquí al tratar cuestiones relativas a los fenómenos osmóticos a tener en consideración en los animales.
1 Hay especialistas que sostienen que los animales celomados proceden de un antecesor acelomado.
Sobre el autor: Juan Ignacio Pérez (@Uhandrea) es catedrático de Fisiología y coordinador de la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU
El artículo Los compartimentos líquidos de los animales se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:El principio de relatividad (1): movimiento relativo
La teoría de la relatividad de Einstein se parece más a la teoría heliocéntrica de Copérnico que a la gravitación universal de Newton. La teoría de Newton es lo que Einstein llamaba una “teoría constructiva”. Se construyó en gran parte a partir de resultados experimentales (Kepler, Galileo) usando el razonamiento, hipótesis estrechamente relacionadas con leyes empíricas y conexiones matemáticas. Por otro lado, la teoría de Copérnico no se basaba en ninguna prueba experimental concreta y nueva, sino principalmente en cuestiones estéticas. Einstein se refería a este tipo de planteamientos como una “teoría de principios”, ya que se basaba en ciertos principios supuestos sobre la naturaleza, cuya validez podría entonces contrastarse con el comportamiento observado del mundo real. Para Copérnico, estos principios incluían las ideas de que la naturaleza debía ser simple, armoniosa y “bella”. En este sentido, Einstein pensaba en términos copernicanos. Como después diría uno de sus estudiantes más cercanos, Banesh Hoffmann,
Se podía ver que Einstein estaba motivado no por la lógica en el sentido estricto de la palabra, sino por un sentido de la belleza. Siempre buscó la belleza en su trabajo. Igualmente, le impulsaba un profundo sentido religioso que se satisfacía al encontrar leyes maravillosas, leyes simples en el Universo.
El trabajo de Einstein sobre la relatividad comprende dos partes: una “teoría especial” y una “teoría general”. La teoría especial se refiere a los movimientos de observadores y acontecimientos que no sufren ninguna aceleración. Las velocidades permanecen uniformes. La teoría general, por otro lado, incluye las aceleraciones.
La creación de la teoría de la relatividad especial de Einstein comenzó con consideraciones estéticas que le llevaron a formular dos principios fundamentales sobre la naturaleza. Una vez formulados estos dos principios, Einstein simplemente siguió la lógica que se derivaba de estos dos principios hasta donde fuera que le llevase. Como resultado Einstein derivó de ellos una nueva teoría de los conceptos de espacio, tiempo y masa, conceptos que están en la base de toda la física. Démonos cuenta de que Einstein no estaba construyendo una nueva teoría para acomodar datos experimentales nuevos y desconcertantes*, sino que derivaba, por deducción, las consecuencias que sobre los fundamentos de todas las teorías físicas tenían sus principios básicos.
Aunque se iban acumulando algunas pruebas experimentales en contra de la física clásica de Newton, Maxwell y sus contemporáneos, a Einstein le preocupaba desde joven la forma inconsistente en que se usaba la teoría de Maxwell para tratar el movimiento relativo. Esto le condujo al primero de sus dos postulados básicos: el principio de relatividad, y al título del que quizás sea su artículo más famoso, “Sobre la electrodinámica de los cuerpos en movimiento”.
Pero empecemos por el principio: ¿qué es el movimiento relativo? Una forma de analizar el movimiento de un objeto es determinar su velocidad promedio, que se define como la distancia recorrida durante un tiempo dado, por ejemplo, 13,0 cm en 0,10 s, o 130 cm/s. Imaginemos que estamos jugando con un cochecito que se mueve con esa velocidad promedio sobre una mesa, y la distancia recorrida la medimos en relación a un metro fijo que tenemos sobre ella. Supongamos ahora que la mesa tiene ruedas y que se desplaza en la misma dirección y sentido que el cochecito por la habitación a 100 cm/s con respecto al suelo de la habitación. Luego, en relación con un metro situado en el suelo, el coche se mueve a una velocidad diferente, 230 cm/s (100 +130), aunque el cochecito se sigue moviendo a 130 cm/s con respecto a la mesa. Por tanto, al medir la velocidad promedio del cochecito, primero debemos especificar qué usaremos como referencia para medir la velocidad. ¿Es la mesa, o el suelo u otra cosa? La referencia que elegimos finalmente se llama el “marco de referencia” (ya que podemos considerarlo como el marco de la imagen que recoge los hechos observados). Todas las velocidades se definen así en relación a un marco de referencia que elegimos.
Pero, siguiendo con el razonamiento, observamos que si usamos el suelo como nuestro marco de referencia, tampoco éste está en reposo. Se está moviendo con relación al centro de la Tierra, ya que la Tierra está girando. Además, el centro de la Tierra se mueve en relación con el Sol; y el Sol se mueve en relación con el centro de la Vía Láctea, y así sucesivamente. . . . ¿Alguna vez llegamos al final de esta regresión? O, dicho de otra manera, ¿hay algo que esté en reposo absoluto? Newton y casi todo el mundo después de él pensaba que sí. Para todos ellos, el espacio era el que estaba en reposo absoluto. En la teoría de Maxwell, se cree que este espacio está lleno de una sustancia que no es como la materia normal. Es una sustancia, llamada “éter”, que los físicos supusieron durante siglos como portadora de la fuerza gravitacional. Para Maxwell, el éter mismo está en reposo en el espacio, y explica el comportamiento de las fuerzas eléctricas y magnéticas y la propagación de ondas electromagnéticas.
Aunque todos los esfuerzos experimentales a fines del siglo XIX para detectar el éter en reposo habían terminado en fracaso, Einstein estaba más preocupado desde el principio, no con este fracaso, sino con una inconsistencia en la forma en que la teoría de Maxwell trataba el movimiento relativo. Einstein se centró en el hecho de que son solo los movimientos relativos de los objetos y los observadores, más que cualquier supuesto movimiento absoluto, lo más importante en esta o cualquier teoría. Por ejemplo, en la teoría de Maxwell, cuando se mueve un imán a una velocidad v con respecto a una bobina fija de alambre, se induce una corriente en la bobina, que puede calcularse con anticipación mediante una fórmula determinada. Ahora bien, si el imán se mantiene fijo y la bobina se mueve a la misma velocidad v, se induce la misma corriente, pero se necesita una ecuación diferente para calcularla de antemano. ¿Por qué debería ser así ?, se preguntó Einstein, ya que solo la velocidad relativa v es lo que cuenta? Como las velocidades absolutas, como el espacio y el tiempo absolutos, no aparecían en los cálculos ni pueden determinarse experimentalmente, Einstein declaró que los absolutos, sobre la base de la supuesta existencia del éter, eran “superfluos”, innecesarios.
El éter parecía útil para imaginar cómo viajaban las ondas de luz, pero no era necesario. Y como tampoco se podía detectar, después de la publicación de su teoría por parte de Einstein, la mayoría de los físicos llegaron a aceptar que simplemente no existía. Por la misma razón, se podía prescindir de las nociones de reposo absoluto y movimiento absoluto. En otras palabras, concluía Einstein, todo movimiento, ya sea de objetos o de haces de luz, es movimiento relativo. Debe definirse con relación a un marco de referencia específico, que puede o no estar en movimiento relativo a otro marco de referencia.
Nota:
* Si nos fijamos, Einstein no seguía el llamado “metodo científico” estándar, que asume que existen datos experimentales que las teorías actuales no pueden explicar. La forma de trabajar de Eisntein, en general, basada en principios estético-filosóficos, nunca se acomodó a la descripción del método hipotético deductivo, considerado como “el” método científico. A este respecto, puede resultar interesante leer La tesis de Duhem-Quine (V): Los métodos de la ciencia
Sobre el autor: César Tomé López es divulgador científico y editor de Mapping Ignorance
El artículo El principio de relatividad (1): movimiento relativo se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Harro egon, munduko larruazalik onena duzu eta
Gorputzaren organo zabalena da larruazala, eta hiru geruzaz osatua dago: epidermisa, dermisa eta hipodermisa. Kanpoko aldean, estratu korneoa dago, korneozito izeneko zelulez osatua. Izan ere, zelula biziak eraldatu egiten dira horrelako egiturazko zelulak emateko. Prozesuari, keratinizazioa deritzo, zeren eta zelula hauetako organuluak behin disolbatuta, beren barneko aldea keratinaz betea gelditzen baita.
Epidermisean hainbat keratinozito mota daude. Ez dauka odol-zainik eta beraz, barneko geruzetatik lortzen ditu oxigenoa eta elikagaiak. Epidermisaren beheko aldean, geruza fin bat dago: xafla basala, funtsean kolagenoz osatua.
Epidermisaren azpitik, dermisa dago, batez ere fibroblastoez osatua. Geruza honek baditu odol-zainak, nerbioak, ile-erroak, eta guruin sebazeoak. Dermisaren azpian, hipodermisa dugu, gantz-geruza bat, dermisari kolageno-zuntzen bidez atxikia.
Lehenengo larruazal sintetikoakJohn F. Burkek lortu zuen lehenengo larruazal sintetikoa. Bera, Traumatologia atalaren burua zen Massachusettseko Ospitale Orokorrean. Ioannis V. Yannas, bestalde, kimika irakasle zegoen Massachusettseko Teknologia Institutuan (MIT). Burkek erredura asko tratatu zituen eta ohartu zen ordezkatu egin behar zela giza larruazala. Yannasek kolagenoa aztertu zuen. 70.eko hamarkadan, biopolimero porotsu bat sintetizatu zuten kolageno-zuntzak eta azukreak erabiliz. Emaitza, giza larruazalaren antzerako zerbait izan zen: material hark azkartu egiten zuen larruazalaren birsortzea. Marrazoen kartilago-polimeroak eta behi-larruazaleko kolagenoak erabili zituzten, mintz fin batean kokatuta. Prozedura horretan, mintza, silikona-geruza batez babesten zen. Azken geruza honek, giza epidermisaren antzera jokatzen zuelarik, hondarren eliminazioa eta famakoekiko iragazkortasuna ahalbidetzen zituen. Larruazal naturala birsortzen zihoan heinean, larruazal sintetikoa birxurgatua gertatzen zen gorputzean zehar. 1979.ean erabili zen lehendabizi giza paziente batekin. Andre bat zen, eta erredura handiak zituen. Ez zuen jasan ez errefusik, ez eta infekziorik ere. Larruazala denbora-epe oso txikian birsortu zen.
Burkek eta Yannasek lortutako emaitzetatik abiatuta, teknologia berriak garatu ziren. Kartilagoa, kolagenoa eta silikona erabiltzen zituzten euskarri eta babes modura. Geroago, “Graftskin” izenekoa sortu zen 1981.ean. Behi-kolagenoz egina zen, eta bertan “ereiten” ziren pazientearen beraren dermiseko zelula biziak.
Egungo larruazal sintetikoakEgun, eskuz sortzen dira epidermisa eta dermisa in vitro. Lehen, kolagenoa, glikosaminak eta fibroblastoak erabiltzen dira dermisa sortzeko; horrekin batera, pazientearen beraren epidermiseko keratinozitoak bakartzen dira, eta ugalarazi egiten dira hazkuntza-teknika espezifikoen bidez. Funtsean, haztarazi egiten dira dermis birsortuaren gainean. Tankera honetako larruazal sintetikoari, “dermis-epidermis birgeruza baliokidea” esaten zaio.
Dermatologian ere erabiltzen da larruazal sintetikoa, adibidez kosmetikako produktuak eta farmako topikoak testatzeko. Hala egiten da edo bestela, testatzeko boluntarioak erabiltzen dira. Europar Batasunean ez da animaliarik erabiltzen honelako produktuak testatzeko, eta beraz, mesede handia egiten du larruazal sintetikoak.
Lyonen dago eskuz larruazala sortzeko ekoizle nagusia. Batez ere kirurgia plastikoko pazienteek emandako ehunak erabiltzen dira. Ehun horiek zatikatu egiten dira, zelulak askatu arte. Geroago, zelula horiek dieta berezi patentatu baten bidez elikatzen dira eta haztarazi egiten dira giza gorputza imitatzen duen inguru batean. Lagin bakoitzak, zentimetro-koadro bat eta milimetro bateko lodiera dauka, eta gutxi gorabehera aste batean eratzen da.
100.000 larruazal-lagin baino gehiago ekoizten ditu enpresak. Bederatzi larruazal-aldaera sortzen dituzte, eta adin eta arraza guztietakoak. Horietatik erdia, kosmetikoen probak egiteko erabiltzen da, eta beste erdia farmazia-enpresei eta lehiakideei saltzen zaie. Egun, 5 metro-koadro larruazal sortzen da urtero.
Etorkizuneko larruazal sintetikoa2016.ean jendarteratu zen kosmetika-enpresa baten eta 3D ehun-inpresioan espezializatua dagoen enpresa baten arteko elkarlana. Larruazal artifizial gehiago sortu nahi zituzten denbora laburragoan.
Larruazala inprimatzearen ideia 2016.ean bihurtu zen errealitate. Esan bezala, plastikoak erabiliz hiru dimentsioko objektuak inprimatzen dituzten gailu berberez baliatzen dira, material modura plastikoak erabiliz. Plastikoen ordez, “biotinta” erabiltzen dutela esan genezake: zelulak eta euskarri gisa balio duten beste material batzuk. Material hauek garapena zuzen egitea bermatzen dute. Ordenagailu batek ematen ditu aginduak, nahastea plaketan jartzeko; horrela, plaketan garatzen doa larruazala. Emaitza, inkubagailu batean sartzen da, kontrolpeko tenperatura batera.
Hasiera batean, eragozpen larria izan zuten, euskarri egokia aukeratu behar zutelako inprimagailuak zelulak jar zitzan. Madrilgo Carlos III Unibertsitatean eta CIEMATen, Nieves Cubok zuzendu zuen ikerkuntza bat; bertan odol-plasma erabili zuten euskarri modura, eta giza fibroblastoak eta keratinozitoak, larruazal-biopsietatik lortuak. 100 cm2 larruazal 35 minutuan lortu zuten. Lortutako larruazala in vitro zein in vivo probatu zen (transplanteetan), eta ikusi zen oso antzekotasun handia zuela giza larruazal naturalarekin, eta eskuz egindako larruazalaren berdin-berdina zela, hau da, dermis-epidermis bigeruza baliokidearen berdina.
Inprimagailuak larruazal autologoa sor dezake, hau da, pazientearen beraren zelulak erabil ditzake. Larruazal alogenikoa ere sor dezake, emaileen zelulen bankuetatik abiatuta. Larruazal autologoa egokia da transplanteetan, eta larruazal alogenikoa farmazia eta kosmetika-produktuak testatzeko.
Era automatizatua eta azkarra da, eta gainera, merkeagoa eskuzko metodoa baino. Hala ere, teknikak baditu bere mugak. Oraingoz inprimagailuak ezin ditu birsortu ez larruazaleko guruin sebazeoak, ez eta folikulu iletsuak eta kolorea ematen duten melanozitoak ere.
Egun, Europako hainbat erakunde batzuek onartzeko prozesuan dago. Izan ere, bermatu egin behar da larruazal hau egokia izango dela transplanteetan. Aurreikusten da 2017.aren amaiera aldean baimenduko duela AEMPSk bere terapiarako erabilera.
Ondorioak70.eko hamarkadan hasi ginen larruazala birsortzen, marrazo-kartilagoetatik behi-larruazaleko kolagenotik abiatuta. Aurrerago, silikona porotsuko mintzak genitu genizkion larruazal horri, eta larruazala laborategian ekoizten hasi ginen, giza zeluletatik abiatuta.
Oraindik ere, larruazala hazten ari gara. Metodo eraginkorra da baina oso geldoa eta garestia.
Orain ordea, badakigu larruazala inprima daitekeela minutu batzuetan. Larruazal bakuna lortzen dugu, folikulurik eta guruinik gabe, zuriagoa eta aseptikoagoa. Perfektuagoa, edo ez, ikuspuntuaren arabera.
Iturriak:
- Miguel Concha , Alejandra Vidal, Christian Salem Z.: Producción de equivalentes dermo-epidérmicos autólogos para el tratamiento de grandes quemados y cicatrices queloideas, Cuad. Cir. 16: 41-47, 2002.
- Esp. Hans, C. Ramos López, MSc. Antonio Gan Acosta, MSc. Jorge L. Díaz.: Artificial skin, Revista Colombiana de Tecnologías de Avanzada, 2. alea, 8. zbk., 2006.
- Cubo, Nieves; García, Marta; Cañizo, Juan F. del; Velasco, Diego; Jorcano, José L.: 3D bioprinting of functional human skin: production and in vivo analysis, Institute of Physics Biofabrication (2016), vol. 9, issue 1 (015006), pp. 1-12 , 2016.
- Penalva, Javier: L’Oreal empezará a imprimir la piel donde probar sus cosméticos. Xataka, 2015.
- Portugal, Amaia: Azala ere inprimatu daiteke. Zientzia Kaiera, 2015.
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Egileaz: Déborah García Bello kimikaria eta zientzia-dibulgatzailea da.
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Hizkuntza-begiralea: Juan Carlos Odriozola
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Catástrofe Ultravioleta #21 PHARMA
En este capítulo nos disponemos a recorrer, desde cero, todos los pasos que se necesitan para descubrir un nuevo medicamento. Entraremos en docenas de laboratorios y conoceremos de primera mano en qué consiste la investigación farmacéutica.
Agradecimientos: Javier Burgos (FIBAO), Juan Diego Unciti (Nanogetic), Manuel Bioque, José Marqués, Pedro Torres y José Riquelme de la fundación AVITE.
* Catástrofe Ultravioleta es un proyecto realizado por Javier Peláez (@Irreductible) y Antonio Martínez Ron (@aberron) con el patrocinio parcial de la Cátedra de Cultura Científica de la Universidad del País Vasco y la Fundación Euskampus. La edición, música y ambientación obra de Javi Álvarez y han sido compuestas expresamente para cada capítulo.
El artículo Catástrofe Ultravioleta #21 PHARMA se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
Entradas relacionadas:Acciones policiales proactivas bajo la lupa científica
En la serie Mindhunter, estrenada recientemente en Netflix y que recomiendo a todo el mundo que vea ya, ahora mismo (en cuanto termine de leer este artículo que con tanto cariño he escrito, obviamente), dos agentes del FBI comienzan en los años 70 a analizar desde una perspectiva científica el comportamiento de determinados criminales.
Lo que estos agentes intentan es aplicar un conocimiento metódico, estadístico, sólido y fiable a la prevención de determinados crímenes utilizando como objetos de estudio a aquellos que los han cometido anteriormente. Además del guion y los personajes, especialmente los malos, basados por cierto en criminales reales, lo interesante de la serie es ver cómo las intervenciones policiales comienzan a seguir criterios científicos.
La historia está basada en hechos reales. Se inspira en un libro Mind Hunter: Inside FBI’s Elite Serial Crime Unit escrito por Mark Olshaker y John E. Douglas, dos exagentes del FBI que llevaron a cabo precisamente la labor que realizan los protagonistas en la serie. Un buen ejemplo de cómo la ciencia se aplica a la investigación criminal.
No solo los crímenes pueden someterse a la meticulosa lupa científica. También las intervenciones de la propia policía. Recientemente las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de Estados Unidos han publicado un informe en el que analizan cuáles de las llamadas prácticas policiales proactivas realmente funcionan para reducir la incidencia del crimen en una zona y cuáles no. Se trata de aumentar la eficacia de los cuerpos policiales y mejorar sus resultados yendo más allá de la mera intuición y aportando una visión estadística rigurosa.
El informe se refiere a las técnicas policiales proactivas, aquellas que se emplean para eliminar y reducir los crímenes, en oposición a las técnicas reactivas, aquellas que se limitan a investigar y resolver crímenes ya cometidos. En cada una de ellas han tratado de responder a varias preguntas: cuál es su impacto en los índices de criminalidad en la zona donde se implementan, cuál es la reacción que producen en la población de la zona, si se están utilizando de forma ética y legal y si existe en su aplicación algún sesgo racial.
Las técnicas policiales que sí reducen el crimen
Un ejemplo es el llamado en inglés hot spots policing o policía en puntos calientes. Esta técnica trata de reducir la criminalidad haciendo que siempre haya agentes apostados en aquellas zonas donde se concentra un mayor número de crímenes. Según los estudios analizados en el informe, esta técnica hace que se reduzcan los delitos cometidos en ese punto sin desplazarlos a las zonas de alrededor.
También ha demostrado su eficacia la acción policial orientada a los problemas (problem-oriented policing). Esta técnica trata de determinar qué causas subyacen en los crímenes de una zona y actuar sobre ellas, ya sea mejorando la iluminación en un punto concreto, arreglando mobiliario urbano o aportando alternativas de ocio para la juventud que de otra forma serían carne de cañón.
Otra técnica analizada es la que llaman de disuasión focalizada (focused deterrence), un intento por mantener controlados a delincuentes reincidentes analizando las causas subyacentes de la criminalidad (marginación, tráfico y consumo de drogas, pobreza, falta de alternativas) e implementando programas que impliquen a las fuerzas de seguridad, a los vecinos y a los servicios sociales en conjunto.
Las técnicas policiales con menos impacto
Algunas de las acciones policiales analizadas no han demostrado ser tan eficaces. Es el ejemplo del alto-interrogación-cacheo (stop-question-frisk), una técnica que consiste en dar el alto por la calle, interrogar y registrar a sospechosos habituales. Los resultados señalan que cuando esta técnica se emplea en puntos concretos con altos índices de criminalidad y sobre criminales con alto riesgo de reincidencia sí parece ser eficaz a corto plazo, pero no existen evidencias sólidas que señalen ese mismo efecto a largo plazo.
Tampoco parece muy clara la efectividad de la técnica de las ventanas rotas (broken-window policing). Está basada en la teoría de que vigilar y controlar entornos urbanos evitando crímenes leves como vandalismo, basura en las calles o consumo de alcohol en público evita que la criminalidad escale y aumente en número e intensidad. Según el informe, esta técnica tiene un impacto a corto plazo, pero pequeño o nulo en la reducción de la criminalidad cuando se aplica de forma agresiva aumentando las detenciones por delitos menores.
La última técnica examinada se llama en inglés procedural justice policing y podríamos traducirla como lo justo de los procedimientos policiales. Se trata de poner el foco en las interacciones policiales con el público y los habitantes de un lugar concreto para transmitir la legitimidad de las acciones policiales, consiguiendo así que la población se involucre y colabore con la policía, consiguiendo una reducción del crimen. Aunque son positivas para mejorar la imagen de la policía en una zona determinada, según el informe no hay evidencias suficientes que confirmen la eficacia de estas iniciativas.
La relación de la policía con el público
El informe de las Academias de Ciencias, Ingeniería y Medicina analiza también cómo la implementación de estas políticas policiales afecta a las relaciones de los cuerpos de seguridad con la población.
Las investigaciones disponibles que las intervenciones policiales en lugares donde se concentra el crimen, como su presencia en puntos calientes, no suelen tener efectos negativos a corto plazo sobre la comunidad en la que se realizan, pero tampoco mejoran la imagen de la policía en esa comunidad. Por eso hacen falta más estudios que permitan entender cuáles son sus efectos a largo plazo.
En cambio, las intervenciones policiales que analizan y tratan de resolver las causas subyacentes del crimen sí que muestran de forma consistente una mejora entre pequeña y moderada de la opinión que la población tiene de la policía. Eso no quita para que siga siendo necesario estudiar las consecuencias a medio y largo plazo.
¿Son técnicas racistas?
El informe ha tratado de determinar si la aplicación de estas políticas policiales proactivas deja entrever un patrón racista. Según sus conclusiones, cuando la policía actúa sobre gente o zonas de alto riesgo, algo común en estas técnicas, son muy probables las disparidades raciales en las interacciones entre los agentes y los ciudadanos. Sin embargo, considera que esto no sirve para establecer de forma concluyente hasta que punto son resultado de una anomalía estadística, un sesgo implícito del observador o un verdadero ánimo racista por parte de los cuerpos policiales.
Por eso hace un llamamiento a ampliar las investigaciones en este campo, de forma que las comunidades y departamentos de policía preocupados por una posible desigualdad racista puedan contar con datos fiables sobre los que actuar. Lo mismo ocurre con los datos a medio y largo plazo sobre la eficacia de estas técnicas, así como la eficacia a mayor escala, observando no solo por zonas sino por ciudades: que no existen.
Referencia:
National Academies of Sciences, Engineering, and Medicine (2017) Proactive Policing: Effects on Crime and Communities. Washington, DC: The National Academies Press. doi: 10.17226/24928.
Sobre la autora: Rocío Pérez Benavente (@galatea128) es periodista
El artículo Acciones policiales proactivas bajo la lupa científica se ha escrito en Cuaderno de Cultura Científica.
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